Leslie no ha perdido el tiempo durante el aislamiento social Autor: Tomada del perfil de facebook del entrevistado Publicado: 06/05/2020 | 02:13 pm
Es difícil, para un deportista, mantener la motivación durante estos días de encierro, de aislamiento. La triatleta Leslie Amat, quizá la cara femenina más identificable de esta disciplina en nuestro país, no se ha dejado vencer por las dificultades y, como hemos podido apreciar en videos caseros publicados por la propia atleta en sus redes sociales, se mantiene «machacándose» en casa para intentar que el impacto negativo de la pausa sea el menor posible, y mantener una forma física óptima que le permita seguir, cuando sea pertinente, en busca de lograr el boleto olímpico.
«La cuarentena me sorprendió luchando por clasificarme a los Juegos de Tokio», nos cuenta Leslie via Whatsapp.
En una terraza, la muchacha ha montado un circuito en unos escasos metros cuadrados. Una piscina inflable le sirve para bracear y mantener las formas en el agua; una bicicleta estática le permite, aunque sin la dureza propia de la ruta, emular el kilometraje de una competición, mientras que un par de ligas atadas a su cintura le hacen resistencia en una carrera en el lugar. ¿Es lo óptimo? No. Pero es un apaño perfecto y necesario para evitar los cantos de sirena que, enestos tiempos, nos llaman a veces a la inactividad.
«Mi entrenamiento de natación oscila de 30 minutos a 45 minutos, el de la bici de 2h a 1h y el de carrera 35 minutos a 45minutos. Además hago trabajo de gimnasio y fortalecimiento TRX».
El TRX es un entrenamiento en suspensión que se desarrolla por medio de un arnés ajustable no elástico, sujeto a un punto de encaje, puede ser pared, puerta, árbol, o cualquier otra superficie alta, fuerte y estática. En el punto de anclaje sale dos cuerdas con agarres, donde el individuo sujeta sus brazos o pies para suspenderse sobre su propio cuerpo corporal, y así realizar los movimientos.
«Estoy entrenando todos los días doble sesión de lunes a lunes, el volumen es menor, solamente estoy ejercitando la capacidad aeróbica. Es inevitable que mi rendimiento baje porque no tengo todas las condiciones para poder trabajar las demás capacidades. Por ejemplo, mi carrera es lo más débil que tengo y es en donde más voy a perder, porque correr en el lugar no es lo mismo que, aunque sea, correr en una cinta», explica.
Triatletas de élite como los españoles Javier Gómez Noya (cinco veces campeón mundial, en los años 2008, 2010, 2013, 2014 y 2015, medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y cuatro veces campeón de Europa) y Mario Mola ( tricampeón mundial en los años 2016, 2017 y 2018 y ganador de siete medallas en estas justas) también realizan por estos días sus entrenamientos en casa, pero como ha podido constatar este redactor en sus perfiles individuales en redes sociales, las condiciones de trabajo de estos deportistas son diametralmente opuestas a la realidad cubana. Aquí, en nuestro país y en otros muchos lugares, se echa mano al ingenio, frente a los altos costos de la tecnología para desarrollar este deporte en casa.
«Cada país tiene sus cosas, pero sí te puedo decir que muchos están nadando en piscinas. He visto que salen a montar bici y correr afuera, que prácticamente no han perdido absolutamente nada; otros están como yo en una piscina que armaron en sus casas, tienen rodillos para hacer bici y una máquina de correr. Hay quien hace ejercicios de ligas específicos para la natación porque no tiene en donde nadar y corren como yo en el lugar con una liga en la cintura. No obstante, a pesar de ciertas similitudes, no estamos en las mismas condiciones».