Con un disparo de 65,30 metros, la cubana se llevó su segundo triunfo consecutivo frente a Sandra Perkovic. Autor: Getty Images Publicado: 08/09/2018 | 09:44 pm
Si muchos pensaron que la victoria de Yaimé Pérez en la final de la Liga de Diamante había sido una cuestión de suerte, este sábado la discóbola cubana volvió a demostrar su temple, para imponerse en la Copa Continental de la IAAF que cierra su actividad hoy en la ciudad checa de Ostrava.
La primera parte del certamen, en donde Yaimé fue segunda (65,00 metros) por detrás de Sandra Perkovic (68,44 m), consistió en tres de series lanzamientos, luego de los cuales la mejor de cada uno de los cuatro continentes (América, África, Europa y Asia-Pacífico) clasificó para una ronda final.
Durante el segundo segmento, la justa pasó a ser de eliminación directa, pues quienes hicieran los peores lanzamientos de cada ronda se quedaban fuera. Así fue que dijeron adiós la africana Chioma Onyekwere —a causa de una falta—, y la asiática Yang Chen (61,63 m), mientras que Pérez (64,01 m) y Perkovic (65,57 m) se mantuvieron «con vida» de cara al lanzamiento definitivo.
A pesar de estar por detrás de la croata durante toda la competencia, Yaimé dejó lo mejor de la jornada para la quinta ronda, y con un contundente envío de 65,30 metros se llevó la corona, toda vez que la estelar croata cometió un costoso foul que la hizo ceder en la carrera hacia el metal dorado.
Luego de repetir su victoria de hace una semana ante la actual campeona olímpica y mundial, la indómita confesó que la concentración fue su arma fundamental para sacar el extra en ese último intento.
«La clave para mis resultados de esta temporada ha sido la superación de mis problemas sicológicos, los cuales he logrado manejar para mejorar mi rendimiento», declaró a la prensa luego de finalizada la acción sobre la pista.
En otro lugar del estadio se disputó la pértiga, modalidad en donde la monarca del orbe de Beijing 2015, Yarisley Silva, se ubicó cuarta al conseguir superar solamente una altura de 4.55 metros.
Por el primer puesto la disputa fue más que cerrada, al punto de que las tres que escalaron el podio: la rusa Anzhelika Sidorova, la griega Katerina Stefanidi, y la estadounidense Sandy Morris, lograron idéntico resultado de 4,85. Al fallar las tres en sortear los 4,90, todo se definió en favor de Sidorova, integrante del equipo neutral, gracias a su única falta cometida, y le siguieron Stefanidi y Morris, por ese orden.