El fallo de Messi desde los 12 pasos pudo haber maquillado la actuación de Argentina. Autor: Getty Images Publicado: 16/06/2018 | 08:29 pm
Las memorias de la Copa del Mundo forman parte de un archivo de proporciones masivas, lleno de momentos antológicos. Claro que dentro de semejante enciclopedia futbolera no solo cuentan las victorias y los goles espectaculares, como aquel «Maradonazo» del año 1986. También se guardan allí, aunque la mayoría preferiría olvidarlos, los recuerdos de pifias defensivas, cantadas bajo palos y fallos sorprendentes de los delanteros.
La tercera fecha de la Copa del Mundo dejó claro que en Rusia 2018 también habría sus dosis de gafe.
En el templo moscovita del Spartak debutaba la Argentina de Lionel Messi, actual subcampeona del mundo. En frente suyo estaría Islandia, un equipo de esos que con sus hazañas despiertan al romántico futbolero que tenemos dentro.
Las dudas de la albiceleste se pusieron en pausa al 19’, momento en que el «Kun» Agüero metía un zurdazo endiablado para batir a Hannes Thor Halldorson, quien más tarde haría honor a su segundo nombre. Hasta ahí, el recorrido parecía más tranquilo que a bordo del Transiberiano. La sacudida vino cuando Alfred Finnbogason pescó un mal despeje del meta albiceleste Willy Caballero y empató el partido.
Volvió entonces la tropa de Sampaoli a su estado más reconocible de los últimos tiempos. De nuevo la desesperación fue más que el talento, y los argentinos se transformaron en aquel mismo amasijo inoperante que dejó escapar tres finales entre 2014 y 2016. Pudo arreglarse todo al 64' cuando el colegiado pitó una pena máxima cometida sobre Maxi Meza, pero el ídolo de Rosario erró el cobro, y de paso engrandeció aún más la figura del meta nórdico.
Un rato después en Saransk, ante Dinamarca, Perú intentaría regresar por la puerta ancha tras más de tres décadas de ausencia. Comenzó inquietando el once del «Tigre» Gareca, con André Carrillo y Christian Cueva rompiendo constantemente el balance. Luego los daneses tomarían aire y también la batuta, aunque el esfuerzo de los altiplánicos se vio recompensado —VAR mediante— con un penal. Por segunda vez en el día, un «10» falló a la hora buena. Esta vez el villano fue Cueva, al enviar la Telstar muy por encima del travesaño.
Se cumpliría en lo adelante una de las leyes no escritas más frecuentes de este deporte, y al 59' Yussuf Yurary Poulsen culminó una jugada individual que hizo a los «incas» pagar por su ineficacia. Ni siquiera la entrada de Paolo Guerrero logró equilibrar las cosas, incluso cuando el «matador» del Flamengo estuvo a punto de marcar de taco un tanto para el recuerdo.
A primera hora, a la poderosa Francia le había costado mucho dominar a los australianos. El exceso de confianza en las filas de Les Bleus los privó de exhibir todas sus armas, y así fue que tuvieron que esperar por el VAR para adelantarse, gracias a un penal cobrado por Antoine Griezmann. Poco después, en otro acto de «justicia tecnológica», Miles Jedinak igualaba la balanza, también desde los 12 pasos. Pero como va siendo patrón, a poco del final se decidió todo. Fue Pogba quien al 87’ puso cifras definitivas con un disparo poco ortodoxo que tocó el larguero y cruzó la raya, con lo justo para ser decretado como válido por el «ojo de halcón», elemento que a la par del videoarbitraje constituye uno de los mayores aciertos de la FIFA en el sentido de que cada cual tenga lo que merece sobre la cancha.
Resultados 16 de junio: Francia 2-1 Australia (Griezmann 59'P y Pogba 87'/Jedinak 62'P); Argentina 1-1 Islandia (Agüero 19'/Finnbogason 23'); Perú 0-1 Dinamarca (Poulsen 59'); Croacia 2-0 Nigeria (Etebo 32’PP y Modric 71’P).
Los duelos de hoy
Costa Rica-Serbia (8:00 a.m.): Con Brasil como cabeza de grupo, este choque en Kaliningrado ofrecerá a centroamericanos y balcánicos la posibilidad más clara de sacar unos puntos que pudieran ser vitales camino a la ronda de 16 mejores. Aunque los serbios presentan a un once más que serio, los centroamericanos tampoco son «pan fresco», por lo cual un triunfo será premio mayor.
Alemania-México (11:00 a.m.): El campeón debuta en Moscú frente a uno de los equipos más polémicos de la justa. Odiados o elevados indistintamente por sus parciales, los aztecas aspiran a la sorpresa, y sin dudas tienen a los hombres necesarios para lograr su objetivo. No obstante, apuesto totalmente por los europeos, siempre inmisericordes.
Brasil-Suiza (2:00 p.m.): Otro gran favorito se presentará, con la meta de no solo vencer, sino de encantar con su juego a los aficionados que acudirán a disfrutarlos a Rostov del Don. En frente, los helvéticos podrían tener algo que decir al respecto.