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Víctor Alejandro Fernández. Autor: Cortesía del entrevistado. Publicado: 21/09/2017 | 07:01 pm
Tenía menos de 15 minutos para atenderme. Víctor Alejandro Fernández Cruz se lanzaría en breve a la piscina de la Ciudad Deportiva con el objetivo de salir del agua con otra medalla en la edición 53 de los Juegos Escolares Nacionales, por lo que, entre síntesis por mi parte, y un poco de ansiedad y premura del lado del nadador espirituano, transcurrió una rápida entrevista bajo la sombra de una pequeña palma y la seria amenaza de un aguacero.
A grosso modo, el pechista de 15 años ha sido uno de los atletas que más metales logró en la presente fiesta deportiva escolar, con un cúmulo de siete (dos coronas en 100 y 200 metros pecho cuatro segundos lugares y un bronce en el relevo libre).
«Estos Juegos Escolares de verdad que los disfruté muchísimo, porque fue la edición en la que más medallas alcancé, con siete, aunque se me escapó el oro de los 50 metros pecho, mi estilo. Tengo que fortalecer mi preparación en algunos aspectos que necesitan perfeccionarse, para luego aspirar a más primeros lugares y ofrecerle más puntos a mi provincia», declaró el adolescente, quien tiene a Michael Phelps como su ídolo internacional, porque «tiene una historia muy linda, es el máximo medallista en Juegos Olímpicos y, sin dudas, es el mejor nadador de todos los tiempos».
Su referente nacional es el primer campeón continental de la natación cubana, Mayito González, quien logró ese rendimiento en los 200 metros pecho de los Juegos Panamericanos de La Habana 1991. «Mi profesor Iván Reyes me habló bastante de la vida deportiva de Mayito, me impresionaron sus tiempos y otras facetas suyas, sobre todo porque fue pechista igual que yo».
«A la primera Copa Marcelo Salado que asistí, en la prueba del estilo pecho fue en la que mejor nadé y a partir de ahí fui desarrollando la técnica y prestándole mucho más interés. Sin embargo, me gusta nadar también los 200 metros combinados y 50 libre o mariposa, pero lo que me identifica es que soy pechista», explicó Víctor.
«Mi primer sueño es llegar a integrar las filas de la selección nacional, después insertarme en competencias internacionales en diferentes países, porque todavía no tengo la experiencia de viajar fuera de Cuba. Ya cuando me establezca aspiro a participar en unos Juegos Olímpicos y en un certamen del orbe. Sé que son sueños muy grandes, pero con dedicación y muchas horas de brazadas los podré alcanzar», concluyó.
