Gilda Casanova se llevó el cetro en los 400 metros planos. Autor: Ricardo López Hevia Publicado: 21/09/2017 | 06:57 pm
Amenazaba el sol con esconderse sobre el capitalino Estadio Panamericano y se notaba en el público cierta desesperación. Solo faltaba la final de los 400 metros planos, rama masculina, probablemente la que más paridad reflejaba entre sus contendientes, durante la segunda fecha del Memorial Barrientos de atletismo, que concluye mañana.
La vuelta al óvalo estuvo reñida, sobre todo en el hectómetro conclusivo, que vio imponerse al mejor atleta cubano en esta modalidad, Yoandys Lescay, con tiempo de 45.90 segundos (s), por delante del estadounidense Brian Herron (46.70 s) y el dominicano Luis Charles (47.00 s).
Sin embargo, no fue Lezcay el único que brilló en esta distancia por Cuba, pues Gilda Casanova lideró a las féminas, al detener el reloj en 52.73 s, para relegar al segundo y tercer puesto a su coterránea Roxana Gómez (53.84 s) y a la mexicana Paola Morán (54.06 s).
«Me encuentro corriendo 400 y 800, pero mi prueba principal es la vuelta al óvalo, que es donde alcancé plata mundial juvenil. Las cosas me salieron bien y se lo atribuyo, sobre todo, a mi mente, que es mi principal fortaleza en todas las competiciones», expresó Casanova.
En la final de los 100 metros planos, el dominicano Christopher Valdés consiguió la corona con registro de 10.20 s, escoltado por los anfitriones Harlyn Pérez (10.22 s) y César Ruiz (10.23 s). Entretanto, la antillana Geylis Montes asió el metal plateado en el mismo tramo, con tiempo de 11.61 s, similar al de la ganadora estadounidense Kelcie Simmons, en decisión tomada mediante foto finish.
Mientras, en otra prueba que causó expectación entre los presentes, el habanero Roger Iribarne ganó los 110 metros con vallas con marca de 13.39 s. A sus espaldas entró el campeón olímpico de Beijing 2008, Dayron Robles, quien de regreso a las pistas, tras cerca de dos años sin acción, consiguió un alentador registro de 13.66 s.
Tras su triunfo, Iribarne declaró haber sentido un poco de presión por correr con Dayron por primera vez y «a pesar de eso las cosas me salieron acorde con la planificación realizada. Estoy satisfecho con este tiempo y pretendo seguir bajando para poder estar al nivel de los corredores de élite».
Otros resultados halagüeños de la jornada fueron logrados por la triplista pinareña Liadagmis Povea, reina con brinco de 14,45 metros, y la discóbola santiaguera Yaimé Pérez, quien envió el implemento hasta los 65,83 metros, su mejor disparo de la temporada, que le permitió lucir la diadema.