Dalidaivis Rodríguez (izquierda) y Omara Durand. Autor: Armando Hernández Publicado: 21/09/2017 | 06:38 pm
Las mujeres, una vez más, dieron la talla por Cuba. Este viernes, a puro corazón y con el talento como guía inquebrantable en su accionar, la judoca Dalidaivis Rodríguez (63 kilogramos, categoría B2) y la velocista Omara Durand (100 metros, T2) tributaron a la Isla sus dos primeros títulos en los Juegos Paralímpicos, con sede en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
En un combate final muy cerrado y a falta de 2:24 minutos para el cierre, Dalidaivis le aplicó una técnica de pierna a la ucraniana Iryna Husieva para enviarla al colchón. El árbitro marcó el wazari, pero la cubanita continúo su trabajo y logró inmovilizarla.
Así, retuvo el cetro olímpico conseguido en Londres 2012, consiguió el primer oro cubano en Río y tomó revancha del revés ante Husieva en el Campeonato Mundial de 2014 para judocas no convencionales. En la categoría B2 compiten los judocas cuyo campo visual es menor de cinco grados.
Mientras, Durand levantó al graderío del estadio Joao Havelange. Y no podía ser para menos. Después de una rápida arrancada acompañada por su guía Yuniol Kindelán, paró los cronómetros en 11:40 segundos, para quebrar su propio récord mundial, que era de 11.48, impuesto en Doha, Catar, en 2015.
Durand se impuso a la azerí Elena Chebanu (11.71) y a la alemana Katrin Mueller (11.99). En la categoría T2 participan los atletas débiles visuales profundos.
Estas dos medallas de oro se suman al metal de plata conseguido por Yunidis Castillo en salto de longitud. Con semejante cosecha, Cuba marcha en el lugar 12 del medallero por países, empatada con Francia, México y Túnez.