Pedro Pablo Pichardo es el triplista cubano con el nuevo record nacional y la tercera en el mundo. Autor: Zimbio Publicado: 21/09/2017 | 06:09 pm
Salió a la arena de Doha con la mirada de siempre y ese aire de superioridad —una especie de guapería mezclada con ego y suficiencia— que lo caracteriza. Tiene solo 21 años el niño y ya se cree un dios del triple salto. Pero, ¿acaso no lo es? Acaba de estampar la tercera mejor marca de todos los tiempos, así, como si nada, y después comenzó a pavonearse con los brazos abiertos, balbuceando esa dichosa palabra que dicen todos los cubanos cuando están molestos, o alegres, o eufóricos. Una mala palabra, bien buena a veces. Cien promesas por delante. Y todo el mundo con la mandíbula descocida, en pleno acto de asombro.
Pedro Pablo Pichardo ganó este viernes la primera parada de la Liga de Diamante de 2015. Firmó 18,06 metros en su ter-
cer intento en Qatar —históricamente solo tiene por delante al británico Jonathan Edwards (18,29) y al estadouniden-
se Kenny Harrison (18,09)— y dejó en plata al norteamericano Christian Taylor (18,04), vigente monarca olímpico y dueño de un soberbio registro que le hubiese valido el oro hasta en una competencia marciana. Pero no ese día ni en ese lugar. Doha se convirtió en la primera ciudad en atestiguar dos cotas por encima de los 18 metros.
El muchacho de la tierra caliente había superado la pasada semana el resultado tope de su carrera, llegando a 17,94 metros en La Habana. Ya se rompió el estigma de que los cubanos solo logran grandes marcas en casa.
La medalla de bronce colgó del cuello del increíble francés Teddy Tamgho (17,24), quien había derrotado al caribeño en el Campeonato Mundial de Moscú 2013. Donde hay desquite no hay agravio. Lamentablemente, el galo se lesionó el tendón de Aquiles durante la competencia qatarí y probablemente sea operado.
Entre el resto de las hazañas en Oriente Medio sobresalió el crono de 9,74 segundos del estadounidense Justin Gatlin en el hectómetro, récord personal y tiempo cumbre de la temporada. También descolló su compatriota Jasmin Stowers, 12,35 segundos en los cien metros con vallas y un apartado en los libros con la rúbrica más impresionante de la lid y en lo que va de campaña.
Lanzando el disco venció la supercroata Sandra Perkovic (68,10 metros), pugna que vio a la cubanita Yaimé Pérez culminar en el noveno puesto (60,19).
Mientras, Bershawm Jackson, de Estados Unidos, voló en la vuelta al óvalo con vallas (48,09 segundos); y en los 3000 metros el etíope Hagos Gebrhiwt (7.38,08 minutos), subcampeón mundial de los cinco kilómetros, aventajó al británico Mo Farah (7.38,22), rey olímpico y planetario en los 5 000 y 10 000.