Iván Oñate contribuyó al triunfo guantanamero. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
La paridad entre Guantánamo y Camagüey, así como el descalabro de Santiago de Cuba, matizaron la fase final del torneo nacional de boxeo por equipos, dirimida en Pinar del Río.
En la pasada versión de este certamen doméstico, Camagüey escaló al trono con calificación de 277 puntos, secundado por Guantánamo (243). O sea, la ventaja fue abismal.
Sin embargo, ahora reinó el equilibrio en la sala 19 de Noviembre, y hubo que recurrir a la última fecha para conocer al campeón. En el cartel matutino del domingo, Camagüey apabulló siete victorias por tres a Santiago y llegó hasta 235 puntos, que parecían suficientes para retener la corona, en espera del duelo entre Guantánamo y Villa Clara.
Ciertamente, el listón quedó bien alto para la tropa del Guaso, urgida de ganar ocho pleitos. Su rival inició con triunfo de Yovani Veitía (49 kg), bronce mundial juvenil, pero ellos se crecieron y marcaron cinco éxitos al hilo, entre estos los de Marcos Forestal (56 kg) e Iván Oñate (60 kg), monarcas del patio.
Luego, el espirituano Maykel Pérez (75 kg) —al igual que el villaclareño Veitía en funciones de «refuerzo» —, quebró el paso de los orientales. Pero después los guantanameros lograron par de éxitos.
Entonces, con la pizarra 7-2, llegó el pleito final en los supercompletos, en el cual salía como favorito el subcampeón nacional Yunier Saúl Castro ante Yoandrys Maceo, un granmense que «robusteció» a Guantánamo. Pero el chico venció 18-10 y su equipo llegó así a 236 puntos, ¡uno más que Camagüey!
Por demás, en los cinco topes bilaterales pactados, el nuevo monarca rubricó 32 victorias y 18 derrotas. En tanto, Camagüey cosechó 30 éxitos y 20 fracasos.
Asimismo, el tercer escaño también debió concretarse en la fecha final, pues Ciudad de La Habana se despegaba de Pinar del Río por solo dos puntos (173 a 171). Pero los capitalinos ganaron siete pleitos y así accedieron al podio de premiaciones.
De tal manera, las posiciones completas fueron como sigue: Guantánamo (236), Camagüey (235), Ciudad de La Habana (224), Pinar del Río (200), Villa Clara (149) y Santiago de Cuba (142). Los santiagueros fueron la gran decepción del torneo, pues del tercer puesto en 2009 cayeron ahora al frío sótano.
La alerta ya está dada para ellos, que tanto brillo han mostrado tradicionalmente en los torneos boxísticos cubanos.
Individualmente, las palmas para el minimosca Marcel Perdomo, dueño de diez triunfos y un revés, merced a su velocidad de manos y piernas. Entre otros, el agresivo púgil pinareño venció al titular nacional Yorman «Coco» Rodríguez, al subcampeón mundial juvenil Yovani Veitía y a Irán «Takechi» Pérez, ex monarca del patio.
En preliminares, Perdomo superó al mundialista Daniel Matellón, aunque este tomó revancha en la final y le propinó su única derrota.
El evento inauguró en Cuba los combates en las nuevas divisiones estipuladas por la Asociación Internacional de Boxeo Amateur desde el pasado 1ro. de septiembre. A saber, los antiguos pesos de 48, 51, 54 y 57 kilogramos, debieron reagruparse en 49, 52 y 56 kilos.
Finalmente, algunos detalles técnicos quedaron para el análisis. Muchos de los chicos inmersos en este «sube y baja de pesos» mostraron su mejor cara, aunque necesitan un poco más de tiempo para adaptarse.
En cambio, otros se vieron fuera de su habitual desempeño, desprovistos de empuje en el último asalto. Esperemos que mejoren en los eventos que se avecinan.