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Revés de Lazo provoca murmullos en el inicio de la Serie Nacional de Béisbol

Autor:

Raúl Arce

La pelota Mizuno ofreció caras opuestas para varios lanzadores de renombre, al debutar los 14 equipos que aún no lo habían hecho

Como si estuviera achatada, la pelota Mizuno ofreció caras opuestas para varios lanzadores de renombre, al debutar los 14 equipos que aún no habían tomado la línea de largada de la XLVII Serie Nacional de Béisbol.

Hoy, en boca de miles, anda el nombre del imprescindible Pedro Luis Lazo. Las Tunas lo lastimó con todas sus espinas, al punto de fabricarle seis carreras limpias en poco más de un tercio del partido, y ante otros hombres de Jorge Fuentes prosiguió el ataque; así fueron insuficientes los cuadrangulares de Valido y de Peraza.

Al tunero Ubisney Bermúdez tampoco le fue bien, pero desfilaron los relevistas, y José Rafael Santana logró darle forma definitiva al primer triunfo de los orientales.

Aroldis Chapman, en cambio, mira desde Holguín hacia el futuro con toda la autoridad que le dan su juventud... y sus muchas millas de velocidad. Lanzó seis entradas con ocho ponches, más que suficientes para echar a pique a Cienfuegos, pues Orelvis Ávila hizo el resto, aunque le marcaron una vez, por un batazo sin fin.

Al camagüeyano Vicyohandry Odelín también le fue de perlas, pues toleró la única de la Isla de la Juventud cuando la pizarra veía transcurrir el octavo. Los de Nueva Gerona llegaron con un novato a cargo de la antesala, Yusnier Castro, y con el venerable Carlos Yanes en el montículo, pero el gran veterano de nuestros torneos no pudo con el peso de los tinajones.

Ángel Peña, con el uniforme espirituano, y ahora dirigido por Juan Castro, se dio a la tarea de ponchar a nueve granmenses. Fue tan cuidadoso que echó a un lado a otro experimentado, Ciro Silvino, quien cargó a sus espaldas una carrera limpia y otra sucia.

Y un segundo tirador zurdo en esta fecha, el matancero Yosvany Fonseca, dejó boquiabiertos a los villaclareños, incapaces de hollar la goma hasta la llegada del cerrador Yousel Aguilar.

Fue una noche de 10 cuadrangulares –sin que Metropolitanos y Ciego de Ávila hubieran terminado su encuentro—de modo que los amantes de los grandes batazos parecen abocados a un año de grandes placeres.

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