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La santiaguera Yulisma Kindelán (izquierda) abrió la senda dorada en la última fecha para el karate cubano. Foto: Juan Moreno, enviado especial CARTAGENA DE INDIAS, Colombia.— La estrella polar, que señala siempre hacia el norte, fue hallada aquí por los karatecas cubanos, quienes conquistaron este lunes otras dos medallas de oro y sellaron su gran actuación en los XX Juegos Centroamericanos y del Caribe, enderezando el rumbo de la delegación de la Mayor de las Antillas hacia la cúspide del medallero, todavía dominado por México.
El karate cubano llegó a esta ciudad con la aspiración de «fajarse» por alcanzar dos o tres medallas de oro, y se fue con seis, además de cosechar tres de plata y otras tantas de bronce, para dominar la competencia por encima del poderoso equipo de Venezuela (cuatro títulos), campeón panamericano, y de México, monarca centrocaribeño en San Salvador 2002, elenco que esta vez se fue con las manos vacías y no pudo aportar las coronas que esperaba su delegación para seguir soñando con ganar los Juegos.
En la jornada de cierre, la santiaguera Yulisma Kindelán (-60 kilogramos), quien no se había visto bien en la contienda por equipos, abrió el camino dorado a vencer 4-2 en la final a la venezolana Karyu Torres.
Minutos después, el bayamés Eynar Tamame (60 kg), el gran favorito de la división por ostentar los títulos del área y panamericano de este deporte, no pudo superar en la final al combativo atleta colombiano Andrés Rendón y cayó con reñido marcador de 6-4.
Y la lucha por dominar la competencia se tensó en el coliseo Chiquinquirá cuando el subcampeón mundial venezolano Jean Carlos Peña (70 kg) superó cerradamente 6-4 en semifinales al antillano Yordanis Torres, quien tuvo que conformarse con la medalla de bronce. Más tarde, Peña ganó el oro dominando al mexicano Emilio Oviedo.
Mas Yaneya Gutiérrez se presentó después intransitable en la categoría open (libre) femenina y superó sucesivamente a la guatemalteca Cheily González (ha sido subcampeona del orbe), a la venezolana Karyu (en tiempo extra) y a la dominicana Sierra, para encaramarse en lo más alto del podio y apuntalar la hazaña cubana.
La victoria fue particularmente agradable para Yaneya, pues era la única atleta que no había podido obtener medallas en la lid individual, aunque sí contribuyó antes al tercer puesto logrado por el colectivo femenino. Así, todos nuestros competidores alcanzaron dos medallas, excepto Yordanis Torres, quien aseguró tres, sumando el oro por equipos a las obtenidas en la última fecha.
Yordanis llegó a la discusión del oro aquí contra el colombiano José Guillermo Ramírez en la categoría open masculina, pero no llevó la iniciativa y los jueces lo castigaron dándole un punto inexistente a su rival en el tiempo extra. ¿Solución para eso? Hay que ganarles tres veces, como diría el entrenador Francisco García Almenares, artífice de la gesta cubana.
