Treinta y un bancos asaltó «El viajero» haciéndose pasar por empleado de una empresa telefónica, luego de anunciar sus atracos a través de la red social Facebook. Según las autoridades, el caco, quien por supuesto nunca reveló su verdadera identidad, jamás usó pistola, sino que entregaba a la cajera de turno un papel donde escribía una amenaza. Todo le salió bien hasta que la policía puso atención a sus «anticipos» después de que, en medio de un robo, el ladrón usara la conexión a Internet para adelantar a sus seguidores donde haría su próximo trabajo. ¿Nunca imaginó que lo podrían estar esperando?