Más de 3 500 títulos de la filmografía nacional quedan a buen resguardo en las instalaciones recién estrenadas. Autor: Maykel Espinosa Rodríguez Publicado: 04/05/2021 | 09:26 pm
Para beneplácito de la cultura cubana, el Archivo Fílmico del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (Icaic) puso a buen resguardo todo su patrimonio en las instalaciones del antiguo Laboratorio Color, con sede en Tulipán y Bellavista, Plaza de la Revolución.
Tras un largo período de acondicionamiento, bajo las más estrictas normas de preservación, los depósitos de la filmografía cubana desde el pasado marzo disponen de la infraestructura adecuada para el amparo de los materiales en celuloides y su digitalización, entre otras funciones.
De acuerdo con José Antonio Canga, director del Archivo, el antiguo local «no requería de condiciones para estadías prolongadas sin movilidad de las copias. La obsolescencia de dichos soportes y el encarecimiento de los procesos tecnológicos determinó la mudanza».
José Antonio Canga, director del Archivo Icaic.
En cambio, el Laboratorio Cinematográfico cuenta con «espacios disponibles, personal calificado, bóvedas de conservación y talleres para revisión y restauración», señala Canga. El traslado permite «la racionalización de instalaciones y la unificación de la actividad patrimonial del Icaic».
El nuevo local posee un departamento de servicios y otro de reparación y preservación del fondo fílmico, con espacios destinados al proceso de transferencia a soporte digital.
«Hoy podemos custodiar mayores opciones de partida (negativos originales y copias). Disponemos de siete bóvedas con los debidos parámetros de climatización para la conservación, con estantería móvil para la ubicación.
Se suman tres talleres con mesas modernas de rebobinado y accesorios para la posible restauración de los daños, así como locales con equipamiento para la limpieza por ultrasonido y tratamiento bacteriológico. Contamos, además, con áreas destinadas a la catalogación, fototeca y videoteca», subraya el director del centro.
La sala de scanner o transfer resulta una de las mayores fortalezas de la bisoña instalación. «Nos ha permitido digitalizar materiales que presentaban alto grado de deterioro», apunta José Antonio Canga, sin embargo, «insistimos en la conservación de originales, pues no disponemos aún de un dispositivo capaz de reproducir toda la información contenida en un fotograma fílmico».
En una tentativa de ampliación y diversificación de sus funciones, el Archivo Fílmico incluye en su actual diseño dos pequeñas salas de proyección: una en 2D y otra en 3D, con capacidad para 18 espectadores cada una.
Mario Fraga Gamoneda, Coordinador de producción y operario de máquina de revelado, junto a una foto de su padre, trabajador del archivo (arriba a la derecha)
Además, ofrece servicios adicionales de respaldo y asesoría para la realización de proyectos, así como asistencia directa en todos los trabajos de restauración de obras nacionales por entidades u organizaciones extranjeras.
El Archivo Fílmico del Icaic atesora más de 3 500 títulos nacionales protegidos en diferentes tipos de soporte. Entre ellos figura la muestra Patrimonio de Primer Grado en el Registro Nacional de Bienes Culturales, compuesta por 21 filmes anteriores a 1959, 47 ficciones, 59 documentales y 17 animados.
Entre sus más preciadas tenencias, salvaguarda 1 493 ediciones del Noticiero Icaic Latinoamericano, declaradas por la Unesco como Registro Memoria del Mundo.
Bóveda No. 1, Positivos y copias de material fílmico.
El Archivo Fílmico del Icaic atesora más de 3 500 títulos nacionales protegidos en diferentes tipos de soporte.
Laboratorio Área Patrimonio Fílmico, Revisión 1.
Taller de revisión de materiales fílmicos.
La sala de scanner o transfer ha permitido digitalizar materiales que presentaban alto grado de deterioro.
Fotos y video: Maykel Espinosa Rodríguez.