Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

La artista plástica, reconocida principalmente por sus expresivosy surrealistas autorretratos, asumió también un activismo en el campo del feminismo, y las ideas de izquierda que la convirtienron en una polémica figura.

 

Además, su historia de vida plagada de dolores físicos y emocionales nutrieron su obra de un especial matiz de sensibilidad.

Una poliomielitis (a los seis años) y un accidente de tránsito (12 años después) que la dejó en cama y la sometió a más de 30 cirugías la empujaron a asumir la pintura como una vida alternativa, y sus diálogos pictóricos con el surrealismo la hizo escalar en el mundo de las artes plásticas, gracias también a la influencia de quien fuera su esposo, el muralista mexicano Diego Rivera.

Sus ideas políticas de izquierda maduraron en un largo proceso vital, llevándola a ser muy criticada por algunos sectores conservadores de la época.

Otro elemento identitario de Frida fue su propia presentación visual en lo personal. Ceñida al traje de mexicana auténtica, con barrocas indumentarias precolombinas, se enorgullecía de su rica tradición mexicana en su propia proyección visual cotidiana.

Nacida el 6 de julio de 1907 en Coyoacán, México, murió un día como este, a causa de una embolia pulmonar, y su propia muerte no estuvo exenta de polémica, cuando su esposo insistió en que el ataúd fuera cubierto por un símbolo del comunismo, a despecho de las negativas de autoridades mexicanas del momento.