Como esta caricatura personal de Laz, otras obras de sus colegas quedaron para recuerdo de este emotivo encuentro. Foto: Irene Salomón
La curva crítica en la que se vio sumido el humor gráfico cubano, a consecuencia de la crisis de los 90 y el llamado período especial, comienza a revertirse, y son numerosos los síntomas de su recuperación.La valoración viene de Arístides Hernández (Ares), representante de la vanguardia de esa manifestación en Cuba y uno de sus exponentes más premiados internacionalmente.
En diálogo con estudiantes de la Escuela de Instructores de Arte Eduardo García Delgado, de la capital, reconoció que aunque las publicaciones que se dedican al tema no alcanzan todavía el esplendor de los mejores años del humor gráfico revolucionario, son evidentes ya signos de cambio.
Entre estos mencionó la fuerza que recuperan las publicaciones como dedeté, Palante y Melaíto, que sobrevivieron a las peores circunstancias, así como la aparición de otras, incluyendo algunas en provincias.
También el reconocimiento alcanzado en eventos internacionales, la revitalización de estos dentro del país, como la Bienal de San Antonio de los Baños, la del dedeté, y de salones y diversos espacios dedicados a promocionar y premiar el humor erótico, la caricatura personal, entre otros.
A ello se suma la apertura ocurrida en las editoriales para la historieta y los comics, la aparición de jóvenes talentos que cultivan el género, y la entrega del Premio Nacional de Artes Plásticas a René de la Nuez el pasado año, muestra de que se rompe el menosprecio que algunos alimentaron hacia la manifestación.
Ares consideró que, aunque aún se sufren los rigores dejados por la crisis y se demanda incrementar las tiradas y frecuencias de las publicaciones, la etapa que queda atrás también abrió nuevas oportunidades y perspectivas, como las de incursionar en un arte más experimental o explotar las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías.
Grata sorpresa fue para los caricaturistas participantes en la Bienal Internacional del dedeté ¡Dale un chance al planeta!, descubrir el talento de quienes pudieran convertirse en su relevo.
Esas potencialidades se expresaron en la muestra Ese homo hace, inaugurada por los visitantes, y cuyas 34 obras en competencia —con el mismo tema ambiental— asombran por su profundidad conceptual y atrevimiento estético.
Un jurado de caricaturistas del dedeté, y de sus colaboradores, premió con el primer lugar a la obra de la estudiante Tania Nuevo Pérez; con el segundo la de Wilber Reyes y el tercer lauro lo ganó Víctor Maury Herrera. Recibieron mención las creaciones de Milay Sala Delgado y Olga Lidia Pol.
Mágico final tuvo este intercambio, cuando los más avezados caricaturistas y su relevo se unieron en un improvisado taller creativo.