Casa de la FEU Después de dos encuentros que protagonizaron los escritores Reinaldo Montero y Senel Paz, respectivamente, la cita ya bautizada por sus organizadores y participantes como El Espacio se va haciendo habitual para un creciente número de estudiantes universitarios y transeúntes que se llegan hasta la Casa de la FEU, situada en 23 y H, Vedado, el segundo miércoles de cada mes.
La idea, según Rubiel García, secretario de Cultura de la FEU, tiene su origen en la voluntad de esta organización estudiantil de potenciar la cultura como instrumento para formar graduados que, además de su nivel profesional, desarrollen un alto grado de sensibilidad e inteligencia que los haga capaces de comprender los problemas del mundo actual. En ello, dice, la lectura tiene una función fundamental.
Complementaria a la creación de la Biblioteca Familiar Universitaria y proyectos como los cafés literarios y los cine-debates que se realizan en el Riviera (muy cercano a la sede de las lecturas) esta iniciativa, cuyos resaponsables son el Instituto Cubano del Libro (ICL) y la Federación Estudiantil Universitaria, constituye un ejemplo de cómo en este mundo dominado por la globalización e Internet es posible rescatar al libro y, muy especialmente, al lector y al escritor como las esencias de estos encuentros periódicos.
Este tipo de reuniones, afirma Fernando Luis Rojas, presidente de la FEU en Ciudad de La Habana, es una experiencia que podría contribuir a desentrañar la pregunta de ¿qué es un triunfador?, la cual, en el período especial, debido a las carencias materiales y otros factores subjetivos, ha priorizado, en ocasiones, para su respuesta la posesión de bienes materiales sobre la de un amplio cúmulo de conocimientos y valores del espíritu.
Adalberto Hernández, vicepresidente de la FEU, piensa que estos primeros intentos han sido un éxito porque más que un espacio de encuentro ha sido de diálogo, de enriquecimiento espiritual, de propiciamiento del acceso a la cultura.
El sábado 22 de septiembre, cuenta Adalberto, estuvo Senel Paz en la UCI y el día de inicio del curso escolar, los estudiantes tuvieron con ellos, en la Universidad de La Habana, a los escritores e intelectuales Fernando Martínez Heredia, Ana Cairo y Daniel Chavarría.
Fernando Luis Rojas, por su parte, afirma que estos no constituyen hechos aislados, sino que se inscriben dentro de una lógica que es resultado de los lineamientos del último Congreso de la FEU. «Allí se hizo mucho énfasis en la importancia de la promoción cultural y del pensamiento. La cultura es, sin duda, una de las prioridades de nuestra organización».
Para los escritores la idea también representa un momento significativo de sus carreras y experiencias personales. «Con los encuentros que últimamente he tenido con los jóvenes estudiantes universitarios, he cumplido un deseo personal y he participado en una iniciativa a la que siempre he dado mucha importancia: los contactos entre los artistas y la juventud intelectual», dice Senel Paz, autor del cuento que sirvió de base al filme Fresa y Chocolote, y de la novela En el cielo con diamantes, de próxima aparición en nuestro país.
La mayoría de los escritores cubanos, añade, hemos sostenido innumerables intercambios con estudiantes y profesores universitarios de otros países, con quienes hemos podido conversar y debatir nuestras experiencias sobre la Revolución y la literatura, pero no con los nuestros. Hemos carecido de esa cercanía y era hora de superar ese alejamiento artificial y dañino.
Para Senel, «la iniciativa del ICL y la actual dirección nacional de la FEU lo está permitiendo, y hay que decir que los eventos, desde su arrancada, han transcurrido de modo más natural y fluidos, como simple reanudación sin nudos».
En lo personal —asegura— no soy muy dado a reuniones que te obligan a ser el centro de un grupo, pero en el caso de los universitarios el estímulo es muy grande: la curiosidad e interrogantes de ellos, y la conciencia por ambas partes de acercarnos a los problemas del arte y la literatura y las experiencias culturales de la Revolución.
En ese espíritu, pienso, está también la próxima convocatoria que me dio a conocer Adalberto Hernández: en noviembre, dedicado al aniversario 85 de la FEU y al centenario de Raúl Roa, se realizará el Festival Universitario del Libro y la Lectura (FULL), que se celebrará de manera maratónica a todo lo largo del país.
En la celebración de este acontecimiento trabajan desde ahora los directivos de la organización estudiantil y los del ICL para que el festival cumpla con el presagio de su significado en inglés: full, que en ese idioma significa lleno, algo a lo que no cabe ni un alpiste más.
Desde, ahora, querido lector, quedas invitado. Como también a ese segundo miércoles de cada mes en la sede de la FEU que, como la lectura, llegó para quedarse. Te esperamos.