Como parte de la estrategia nacional diseñada para la contención de la COVID-19, y justo en medio del mayor rebrote de la enfermedad, este fin de semana comenzó a funcionar en la provincia más oriental de Cuba el laboratorio de Biología Molecular número 22 de país, tras una inversión que supera el millón de pesos.
Ubicado en el Centro provincial de Higiene y Epidemiología, el laboratorio laborará las 24 horas y está en capacidad para realizar en tiempo real hasta 500 pruebas de Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR), método basado en la detección del ácido ribonucleico (ARN), que permite determinar si una persona está contagiada o no con el virus causante de una enfermedad.
La ejecución de la obra civil estuvo a cargo de constructores de las provincias de Guantánamo y Granma y la tecnología con que cuenta tiene un alto nivel de precisión y confiabilidad. Que el territorio disponga de esta instalación, acerca los resultados al lugar donde se toman las muestras y permite dar respuesta rápida para decidir el tratamiento.
En esa vertiente de la pelea cubana contra la pandemia, laboran en turnos rotativos 42 trabajadores, la mayoría de ellos mujeres y jóvenes, adiestrados en un centro similar en la vecina provincia de Santiago de Cuba.
Cuando el 11 de marzo del pasado año se reportaron los primeros casos de contagio con el coronavirus SARS-COV-2 en Cuba, solo se contaba con un laboratorio de este tipo en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, de la capital. En menos de 12 meses el país ha habilitado otros 21, distribuidos por todo el país.