La suma de todos nuestros esfuerzos hará el milagro de la prosperidad sostenible

Defender la producción nacional, diversificar e incrementar las exportaciones, sustituir importaciones, fomentar los encadenamientos productivos, potenciar la empresa estatal, avanzar en la soberanía alimentaria, potenciar el desarrollo local, cumplir la política aprobada de la vivienda y poner la ciencia en función de la solución de los problemas de la economía, son ejes medulares de la estrategia económica del país para continuar con el desarrollo de un socialismo próspero y sostenible.

Para llevarlo a cabo, y lograr, además, una motivación individual y colectiva, el 27 de junio último se dieron a conocer un conjunto de medidas económicas que han generado un amplio respaldo del pueblo a la par de interrogantes, muchas de las cuales fueron aclaradas este martes en la primera de las mesas redondas dedicadas a brindar más detalles sobre las medidas adoptadas por el Consejo de Ministros.

En el espacio radiotelevisivo —transmitido en vivo desde el Palacio de la Revolución— se dieron cita Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; Alejandro Gil Fernández, Meisi Bolaños Weiss y Margarita Marilene González Fernández, ministros de Economía y Planificación, Finanzas y Precios, y Trabajo y Seguridad Social, respectivamente, así como otros invitados.

Desde los primeros minutos de la Mesa Redonda, Díaz-Canel insistió en que las medidas no son populistas, como las han querido catalogar los enemigos de la Revolución, sino que son el resultado del intercambio fructífero con el pueblo en diferentes escenarios, en función de conocer sus reclamos y demandas.

Un análisis integral obliga a desarrollar la implementación de estas medidas por etapas, por lo que este incremento salarial anunciado para los trabajadores del sector presupuestado, no es el definitivo, agregó. «Vamos hacia una reforma salarial que contempla una política de precios más coherente, la eliminación de la dualidad monetaria y cambiaria. Será una acción más amplia y que ahora tuvo su primer paso, sin que contradiga lo que haremos después».

El Presidente cubano subrayó que las coyunturas actuales marcadas por la perversidad y las numerosas dificultades que genera para Cuba la actual política de Trump crean problemas en el orden interno del país en lo concerniente a la persecución financiera, la contracción de los créditos, el cierre absoluto de los mercados más próximos, el ataque despiadado a los que se atreven a comercializar con Cuba, entre otros aspectos.

«Sin embargo, nadie en Cuba ha perdido el sueño por esa política injerencista y nosotros hemos ratificado que no renunciamos ni renunciaremos a hacer que nuestra economía pequeña y asediada durante 60 años por el Gobierno norteamericano sea próspera y sostenible. Ninguna amenaza nos va a distraer del deber de defender la invulnerabilidad de la Revolución y eso ya es un anhelo, un compromiso y la voluntad del Gobierno y el pueblo cubanos.

«Todos los días vamos a arrancar los pedacitos de los problemas y justo ahora rompemos una inercia, le damos otra dinámica a la problemática de los salarios y a la relación con los ingresos en un sector que merece esa atención porque en él se defienden las conquistas de la Revolución y en el que se ofrecen servicios públicos que la familia cubana exige y reconoce», expresó.

Sacar a flote las capacidades y reservas internas

Alejandro Gil Fernández, ministro de Economía y Planificación, reafirmó que las medidas anunciadas persiguen el impulso de la economía del país, por lo que no son estáticas, sino que se incrementarán en función del contexto que enfrentemos. «No tienen solo el objetivo de resistir el cerco económico y financiero al que nos somete el Gobierno de Estados Unidos sino que en medio de las circunstancias existentes, nos empuja a evaluar nuestras posibilidades para avanzar en nuestro desarrollo. Solo lo lograremos si todos los actores económicos del país confluyen en el mismo camino, porque tenemos todas las condiciones para ello».

Precisó que a partir de la prioridad establecida se trata de sacar a flote las capacidades y reservas internas que tenemos en el país para hacer frente a la situación que se nos presenta. «Es esencial redoblar esfuerzos para incrementar las producciones nacionales para obtener el alimento animal y el humano, de hecho avanzamos en el balance del alimento importado, con el control de las divisas y los contratos correspondientes.

«Implementar las políticas aprobadas para fomentar la ciencia y la innovación, así como priorizar la asignación de los recursos financieros y materiales a la industria nacional es otro de los objetivos. Es importante el proceso que se lleva a cabo ahora de la discusión del plan de la economía de 2020, porque urge realizar un debate en el sector empresarial para la búsqueda de soluciones», señaló.

El titular del ramo enfatizó en que se trabaja bajo el principio de no importar nada que podamos producir en el país, según nuestras posibilidades y capacidades. Acotó que es vital concentrar esfuerzos en el cumplimiento de producciones dirigidas a garantizar la exportación, la producción de alimentos, los insumos para el turismo, fuentes renovables de energía, el programa de informatización y de medicamentos.

«Alimentos y combustible es la factura principal de importaciones y todo lo que podamos hacer para garantizar su sustitución es necesario, para propiciar ahorros importantes que nos conduzcan a la soberanía alimentaria y energética. Debemos además priorizar el turismo, teniendo en cuenta su rol en el desarrollo del país y los esfuerzos y recursos que se invierten en esa actividad, en la que, como en las demás, debemos evaluar los gastos para suprimir aquellos que no sean imprescindibles y ajustar los presupuestos asignados», detalló.

El Ministro detalló que se pondrán en vigor medidas de ajuste para el consumo de portadores energéticos, priorizar la instalación de GPS en el uso de portadores energéticos para favorecer el control y eliminar el robo de combustible, a lo que también contribuye el incremento del uso de la tarjeta magnética para favorecer el control.

«Establecemos que los exportadores, en principio las entidades del Ministerio de Turismo, las del grupo empresarial de Tabacuba y otras que se decidan posteriormente, adquieran productos y servicios nacionales pagando el 50 por ciento de su valor con respaldo de liquidez. No siempre tenemos la opción de sustituir el elevado componente importado porque muchas veces pasa que no le llega a tiempo la divisa al sector empresarial nacional.

«Sin embargo, ellos generan divisas y si no tienen a tiempo el producto nacional, acabamos importando. Lo que el país ingresa por exportaciones, no solo debe utilizarse en importaciones sino que se use también para pagar a proveedores nacionales que lo suministran. No basta con tener la voluntad de hacerlo, sino que tenemos la obligación de crear mecanismos financieros que permitan hacerlo».

Niveles de actividad que aporten eficiencia

Buscar la solución del déficit de recursos de la economía y flexibilizar la planificación son otros elementos significativos del conjunto de medidas a implementar, sin perder su esencia centralizada. En tal sentido, Gil Fernández dijo que «el Plan no puede ser una camisa de fuerza ni en su elaboración ni en la ejecución, y es importante trabajar por incorporar al plan de la economía niveles de actividad que aporten eficiencia y que nos permitan fortalecer la empresa estatal».

Reveló que se estudia si es viable o no el uso de la criptomoneda, las medidas que propician una mayor autonomía del comercio mayorista y la eliminación de trabas que dificultan el encadenamiento productivo, en tanto urge que se fomente la responsabilidad entre el que asume la deuda y el que la paga.

Igualmente, acotó que se evalúa la posibilidad de que las empresas puedan retener total o parcialmente los sobrecumplimientos de las exportaciones y que, de todas las maneras posibles, se hagan coincidir los intereses de los trabajadores con los de la empresa y con los del país.

El titular de Economía y Planificación se refirió a la aplicación de un sistema de relaciones entre las empresas y la Zona Especial de Desarrollo Mariel, para que las empresas retengan el 50 por ciento de las divisas, en la medida en que se vislumbra la necesidad de aprovechar las potencialidades del Mariel, del turismo y de otros exportadores.

«Es un paso importante en el avance de los encadenamientos productivos, que no puede ser un concepto vacío, como también evaluamos la facultad de algunas empresas para importar determinados productos que tributen a sus producciones».

Otra de las medidas comentadas se relaciona con el incremento del pago de las utilidades a los trabajadores a cinco salarios medios bajo el requisito de cumplir indicadores, así como la flexibilización de la aprobación de los sistemas de pago que debe realizarse a nivel de empresa y priorizar el destajo.

Es esencial, destacó, que se logre asegurar el cobro de los impuestos por la disciplina fiscal y financiera, garantizar la contabilidad de los hechos económicos, fomentar e incentivar las exportaciones de bienes y servicios por la estrategia integral para ello, las propuestas para estimular las exportaciones y buscar el incentivo para nuestros productores y las propuestas para realizar las exportaciones por las formas de gestión no estatales.

Apuntó que también deben implementarse medidas para reducir la importación por personas naturales e incrementar la captación de divisas que en la actualidad salen del país. En tal sentido, Gil Fernández recalcó que se trabaja para crear productos financieros atractivos que permitan captar parte de las remesas y ponerlas en función de proyectos de interés económico y social para el que aporta los recursos y para el país.

No puede existir aumento de precios

En otro momento de su intervención, el Ministro de Economía y Planificación se refirió al tema de los precios. Señaló que mejorar el incentivo al trabajo mediante el incremento del salario para el sector presupuestado y el perfeccionamiento del salario en el sector empresarial, manteniendo su vinculación con los medios productivos es, justamente, una de las medidas que no tiene por qué condicionar un aumento de los precios.

«Incrementaremos el salario en el sector presupuestado, dígase Educación, Salud, los organismos de la Administración Central del Estado y otras entidades que dependen del presupuesto del Estado, a través de las cuales se ofrecen bienes y servicios gratuitos y que cuando se cobran, el precio no se correlaciona con los costos.

«Por lo tanto un incremento del salario no redunda en un aumento de los precios del sector presupuestado y tampoco modificamos el salario del sector empresarial ni los impuestos. No hay causa alguna que justifique que exista un incremento de precios en el sector empresarial, sino que estos deben mantenerse. Las reglas del juego se mantienen. No hay nada que justifique que los precios suban desde el punto de vista de los costos».

Gil Fernández puntualizó que de manera temporal se incorporará a la distribución normada renglones básicos cuyo financiamiento no está asegurado en su totalidad. «No se trata de regresar productos a la venta normada, pero hay que garantizar que lleguen a la población. En relación con los productos cárnicos solo se afectaría, en caso necesario, la venta liberada de carne de cerdo.

«Se ha recuperado gradualmente, pero direccionamos esos recursos con el objetivo de multiplicar la producción de embutidos y otras opciones para garantizar la oferta a la población», detalló el Ministro, quien aseguró que elevar el nivel de vida de la familia cubana, a la par desarrollar nuestro proyecto socialista, próspero y sostenible, es el objetivo esencial de toda transformación que hagamos.

Enderezando la pirámide

Ningún trabajador del sector presupuestado está excluido del incremento salarial que como parte de las nuevas medidas económicas ha sido diseñado para ese ámbito, afirmó Margarita González Fernández, ministra de Trabajo y Seguridad Social.

La elaboración de la propuesta, expresó, fruto del trabajo combinado de muchos compañeros, entre quienes no faltaron académicos y expertos, comprende a todos los trabajadores del sector presupuestado, de las organizaciones políticas y de masas, y las asociaciones que dependen totalmente o en algunos casos parcialmente del Presupuesto del Estado.

Sobre dudas e inquietudes que han surgido en estos días a propósito de las medidas y en particular en lo concerniente al ámbito de la Educación, la titular aclaró que los trabajadores no docentes también son beneficiados, al igual que quienes laboran en la Salud y no son directamente especialistas, o los de Educación Superior que no son docentes.

Entre los objetivos planteados con esta medida, según explicó González Fernández, está el tratamiento a los trabajadores de menores ingresos. Después de varios análisis, dijo, se decidió que el salario mínimo se incrementara a 400 pesos. Ahora, el que menos incrementa el salario mínimo lo hace en cien pesos; y el que más lo incrementa, en 155.

Se trata de un incremento significativo, enfatizó la Ministra de Trabajo y Seguridad Social, que entraña en sí dar un primer paso, aunque no es la solución definitiva de un problema que tenía la escala salarial actual.

Otro de los propósitos del incremento salarial radica en reconocer a los sectores de la Salud, de la Educación General y Media, de la Educación Superior, y de la investigación. La titular hizo referencia a comentarios de quienes se han preguntado por qué los cambios son ahora en el sector presupuestado (cuya productividad no es tan «tangible»), y no en el empresarial.

Técnicamente medir la productividad del sector presupuestado puede ser un poco difícil, reflexionó la Ministra de Trabajo y Seguridad Social, y seguidamente planteó algunas interrogantes: ¿Cómo medir la productividad de un neurocirujano en un hospital, operando pacientes?, ¿cómo medir la productividad de un profesor de la Educación Superior que prepara a futuros profesionales que después irán al mismo sistema empresarial? ¿Cómo medir la productividad de un maestro en una escuela primaria, o en una secundaria, o en un preuniversitario, el cual, prácticamente, se hace cargo de nuestros hijos?

De un concepto importante habló la Ministra en su intervención: se trata de un reconocimiento especial a quienes permanecieron en espacios cardinales de Cuba, dándolo todo y a pesar de las condiciones más adversas. En otro momento, alertó sobre la necesidad de que la medida no conlleve «a inflar las plantillas», problema que tipificó de cíclico. Es preferible, subrayó, tener un pequeño grupo de personas que aporten bastante, a tener una gran plantilla llena de gente que no lo haga.

Con un plantilla «inflada», comentó, estaríamos malgastando el dinero que con tanto esfuerzo el Estado ha dedicado para respaldar este incremento que beneficia a más de un millón 470 000 trabajadores en números redondos, con un costo de 750 millones de pesos.

«Los recursos que el Estado está destinando a la medida son significativos, y el salario medio mensual se eleva a 1 067 pesos», comentó la titular. La decisión, detalló, implica la modificación y aprobación de más de 60 normas jurídicas, y comenzará a aplicarse con el salario correspondiente al mes de julio, el cual se pagará en los primeros días de agosto.

En el caso de la seguridad social, recordó que en noviembre de 2018 se había incrementado la pensión mínima: «en este momento se vuelve a hacer un pequeño incremento a la pensión mínima, y además se incrementan todas las cuantías de las pensiones que son inferiores a 500 pesos. Esto prácticamente abarca un millón 550 mil pensionados, y el costo está en el orden de los 838 millones de pesos».

Los programas sociales de la Revolución continúan

Meisi Bolaños Weiss, ministra de Finanzas y Precios, reiteró por su parte —como ya se ha informado— que los más de 7 000 000 000 de pesos que costará el incremento de los salarios en el sector presupuestado y los gastos que representará la elevación de las pensiones en el sistema de Seguridad Social, se financiarán con los dineros dispuestos en el Presupuesto del Estado para el año 2019.

Las fuentes de estos incrementos se basan en «el principio de redistribución que caracteriza al presupuesto centralista»; no obstante, dijo, tendrán que estar acompañadas y complementadas por un grupo de mecanismos y resortes que permitan no solo el ahorro de los recursos presupuestarios y el control de los gastos, sino también recaudar más ingresos.

El país, señaló, todavía tiene muchas potencialidades a partir de los indicadores de eficiencia y de eficacia presentes. Todos los actores económicos tenemos que aportar, ir a una producción más amplia y diversificada, y hacerlo con mayor rendimiento. Estamos hablando, puntualizó, de ampliar la oferta de servicios y bienes a la población para que pueda materializar la nueva capacidad de compra; lo cual, al mismo tiempo, incrementará los ingresos al Presupuesto del Estado.

Como otra fuente para respaldar los actuales incrementos salariales, la Ministra de Finanzas y Precios señaló la necesaria reducción de los presupuestos a todos los niveles. Esto incluye el retiro de los gastos inejecutados en lo que va de año. Añadió que son partidas que sabemos ya no se van a ejecutar y que no ponen en peligro los principales niveles de actividad y servicios a la población.

Incluso se preservan, con toda la racionalidad debida, los programas sociales. Unido a este incremento salarial seguirá, por ejemplo el otorgamiento de subsidios para la compra de materiales de la construcción a personas de bajos ingresos, y el programa de vivienda; o sea, no vamos a dejar de hacer los programas sociales para pagar más salarios, detalló.

Estamos invitando a todos los actores de la economía —insistió— a buscar las reservas de ingresos y potenciarlas, y a buscar, desde el ahorro, la propia financiación del incremento salarial, tanto el sector estatal, que es el aportador mayoritario al Presupuesto del Estado, como el no estatal, con el cumplimiento disciplinado de las obligaciones fiscales.

A propósito de una pregunta del moderador de la Mesa Redonda, Randy Alonso Falcón, sobre cómo se actuará para evitar un proceso inflacionario; o sea, que un incremento de los precios a bienes y servicios a la población anulen los propósitos del incremento salarial, la titular del Ministerio de Finanzas y Precios se refirió tanto a la implementación de mecanismos descritos anteriormente para incrementar las ofertas, como a la adopción de un grupo de regulaciones para controlar el desarrollo de los precios en los mercados mayoristas y minoristas.

Señaló, por ejemplo, el establecimiento de un observatorio para monitorear y revisar el comportamiento de los precios; no obstante, indicó que en esto es fundamental la participación de toda la población y las autoridades en las bases, como el delegado del Poder Popular, los presidentes de los consejos populares y los gobiernos locales.

También —abundó— tenemos que llamar a la sensibilidad y a la solidaridad de las empresas y las entidades estales, y los actores económicos no estatales. «Esta es una medida que favorece a todo el sector presupuestado, pero también la prestación con mayor calidad de los servicios que recibimos todos los cubanos y las cubanas por igual».

Bolaños Weiss explicó por último que los beneficios al sector presupuestado están acompañados de un principio de solidaridad, en el sentido de la generalización a estos trabajadores del pago de la Contribución Especial a la Seguridad Social, como vienen haciendo los maestros y médicos, y quienes laboran en las áreas de la Fiscalía y los Tribunales a partir de los incrementos parciales de salario que tuvieron años atrás.

Ningún trabajador del sector presupuestado está excluido del incremento salarial. Foto: David Gómez Ávila.

Las medidas implementadas buscan incrementar las producciones nacionales y fortalecer la empresa estatal socialista. Foto: Abel Rojas Barallobre.

Convoca el Presidente

En sus consideraciones finales, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros señaló que ahora hay que prepararse para la implementación concreta de las medidas en cada lugar y para las explicaciones que hay que dar a los trabajadores, para lo cual se han estado capacitando las estructuras de dirección.

«Estamos convocando para que estas medidas tengan el impacto que estamos esperando, estamos convocando a pensar y actuar como país, lo que lleva un sentido de responsabilidad social de todos, de participación de todos, de aporte de todos, y donde sobre todo conjuguemos los intereses que podemos tener desde el punto de vista personal y familiar, con los intereses sociales, y que eso se vaya por encima de vanidades, de egoísmos, de actitudes irresponsables.

«Estamos convocado a pensar y actuar como país primero para no regresar a condiciones de Período Especial», señaló el Jefe de Estado al denunciar el anhelo del Gobierno de Estados Unidos de seguir presionándonos, de seguir complicando nuestra situación. «Hoy estamos en mejores condiciones que en aquel momento para enfrentar toda esta plataforma colonizadora, plataforma que trata de cortar la emancipación que ha generado el proceso de la Revolución Cubana», aseveró.

Lo que estamos proponiendo, agregó, nos está también ayudando a tener un mayor ordenamiento para medidas que habrá que aplicar en el futuro y que ya de alguna manera están anunciadas, en proceso o se les están haciendo los últimos ajustes, y que son necesarias para que nuestra economía funcione de una manera correcta.

Más adelante, Díaz-Canel señaló: «¿Qué esperamos con esto? Entre otras cosas, dijo, que haya más motivación por parte de los trabajadores para producir más y con calidad. Que haya más compromiso en trabajar más y contagiar, buscar productividad.

«Estamos hablando de más rendimiento, de mejor aprovechamiento de la jornada laboral, de que en cada puesto de trabajo seamos más eficientes y productivos, que mantengamos la producción de alimentos para lograr la soberanía». También —agregó a continuación— que toda la economía del país se apoye, encadenándose para seguir adelante en estos propósitos.

Al abundar sobre el incremento salarial para el sector presupuestado, el Presidente aclaró que las medidas adoptadas y las facultades otorgadas a las empresas, indirectamente también influirán en una mejoría de las remuneraciones en el sector empresarial si ofrecen una respuesta productiva que responda a la nueva demanda que va existir, por lo que exhortó a esos trabajadores y sus directivos a aprovechar la oportunidad.

Más adelante, el mandatario cubano, que calificó las actuales decisiones «como pasos arriesgados, pero necesarios y también alentadores», recordó la siguiente frase del Che Guevara: «Déjenme decirles, a riesgo de parecer ridículo, que el revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor».

A propósito, Díaz-Canel señaló: «Nosotros aprendimos con nuestros padres fundadores, con Fidel y con Raúl, con los Comandantes de la Revolución y con todos los luchadores que han estado acompañando esta batalla por sostener contra viento y marea a la Revolución Cubana, la fuerza de ese amor».

«Esa fuerza de amor está precisamente en la unidad sólida, fuerte, indestructible que tiene la Revolución con su pueblo, y una Revolución como esta solo puede sostenerse por el amor del pueblo, porque es que el pueblo es la Revolución misma.

«Todas las medidas que tomamos y las que tendremos que tomar en el futuro inmediato, seguramente solo tendrán éxito si el pueblo las hace suyas (...), si las defiende, y si entiende que ninguno de nosotros puede tanto como todos nosotros juntos. Hemos venido a hacer una convocatoria al trabajo, a la creación, a esa creación revolucionaria con pasión, con belleza, con inteligencia, y por supuesto, también con amor.

«A darle contenido a todo lo que nos hemos propuesto para hacer un país mejor, aportando cada uno, desde la posibilidad de participación que tengamos, lo que pueda aportar», exhortó Díaz-Canel, para quien «la suma de todos esos esfuerzos harán el milagro de la prosperidad sostenible a la que no hemos renunciado y por la cual vamos a seguir combatiendo.

«El enemigo nos quería castigar con un duro verano, lleno de incertidumbre y de malas noticias. Hoy podemos decirles a los señores imperialistas que solo tenemos una mala noticia que dar, y es que aquí está la Revolución Cubana victoriosa, y que esa Revolución Cubana va por más, incluso en medio de situaciones difíciles, y para eso contamos con esa Revolución imbatible que es el pueblo cubano, con su liderazgo histórico y también con las nuevas generaciones comprometidas con su presente histórico y con su esperanzador futuro».

Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana