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Los habitantes de la zona norte del litoral habanero vivieron en la tarde del lunes momentos tensos. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 06:48 pm
Cientos de personas se amontonaron alrededor de la crecida, con la mirada fija en el lento, pero siempre amenazante paso del mar. Los habitantes de la zona norte del litoral habanero vivieron en la tarde del lunes momentos tensos, a causa de las penetraciones del mar motivadas por los persistentes vientos que azotan durante estos días al occidente cubano.
Bárbara Morales, vecina de Paseo 101, entre 5ta. y 7ma. (Calzada), contó a este reportero haber dejado sus cosas resguardadas antes de la evacuación. No obstante, la duda de encontrarlas intactas pareció aflorar ante la visión del mar que de a poco se adentraba en La Habana.
Foto: Roberto Suárez
Según autoridades de la Defensa Civil, las penetraciones comenzaron alrededor de las cuatro de la tarde, y continuarían avanzando hasta las siete de la noche, hora estimada de la pleamar o punto más alto de la marea. Todo ello obligó a retirar el servicio eléctrico a la zona afectada, y proceder a la evacuación de sus habitantes.
El teniente coronel Mario García Salas, jefe del Órgano de la Defensa Civil en La Habana, explicó que hasta el momento de este reporte, el agua había llegado hasta Calzada (7ma.) por Paseo, y se había extendido desde las calles K hasta 12.
Foto: Roberto Suárez
García Salas agregó que, de acuerdo con los planes de estudio de vulnerabilidad y riesgo de la provincia, las penetraciones del mar fueron moderadas, y el agua había llegado hasta el punto estimado, según el Parte Especial Número 2 del Instituto de Meteorología.
«Como podemos ver, las penetraciones no son significativas en altura, pues solo llegan al nivel del contén. No obstante, en áreas más bajas, como es la parte de Calzada, sí ha habido más de qué preocuparse», agregó.
Foto: Roberto Suárez
Jair Morales Rodríguez, primer secretario del Comité Municipal del Partido de Plaza de la Revolución, apuntó que no habían sido reportadas pérdidas de vidas humanas ni de recursos materiales, gracias a las tempranas alertas y a la aplicación de todas las medidas necesarias para salvaguardar tanto a la población como a sus bienes.
El dispositivo defensivo territorial, compuesto por los bomberos, el sistema de salud pública, la Cruz Roja, y los compañeros de recursos hidráulicos, se mantuvo en actividad para garantizar las acciones de seguridad en ese sentido.
