SANTA CLARA, Villa Clara.— Estar en un sitio como la Sala de Urgencia de la antigua Audiencia de Las Villas, donde Fidel hizo historia, siempre emociona, sobre todo cuando todavía lacera su pérdida física.
Estudiantes de Derecho, trabajadores del sector de la justicia y autoridades políticas y gubernamentales, entre ellas Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del Buró Político y secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, recordaron aquí, el miércoles último, cómo el 14 de diciembre de 1950, hace 66 años, el Comandante en Jefe protagonizó su primera autodefensa.
Lo acusaban, junto a su compañero Enrique Benavides, de organizar disturbios en la ciudad de Cienfuegos, adonde había llegado para participar en un acto de protesta contra decisiones del Ministro de Educación que afectaban a los estudiantes.
De manera contundente y viril, el joven jurista dijo verdades que jamás se habían escuchado en aquella sala, donde el Tribunal tuvo que absolver a los acusados por entender que no se había probado el delito.
En aquella autodefensa, el líder revolucionario argumentó abiertamente sobre la falta de garantías constitucionales, los atropellos del régimen, la política corrupta de Prío Socarrás, la malversación y otros males que sufría Cuba.
A propósito de la recordación, el joven Fabel Águila Valdés expresó que para las nuevas generaciones de juristas constituye un compromiso continuar el legado de Fidel en la abogacía.