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SANTIAGO DE CUBA.— Cuba redujo las lesiones no intencionales en menores de 20 años durante el último decenio, y cuenta con nuevas acciones para minimizar la mortalidad por esa causa y garantizar más calidad de vida a los accidentados.
Lo anterior lo informó a la prensa Roberto Álvarez Fumero, jefe del departamento Materno-Infantil del Ministerio de Salud Pública (Minsap), al término del II Curso Nacional sobre Manejo Inicial del Paciente Pediátrico Lesionado, que reunió en esta ciudad a médicos generales integrales, pediatras y otros expertos provenientes de las cinco provincias orientales.
«La mejor profilaxis está en el trabajo de los especialistas y organismos en la comunidad, donde la vigilancia familiar del infante y adolescente es esencial», arguyó Álvarez Fumero.
En el taller, coauspiciado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y el Minsap, varios especialistas ratificaron la importancia de una acertada evaluación primaria en traumas de tipo torácico, abdominal, cráneo-encefálico, raquimedular, shock en el trauma y paro cardiorrespiratorio.
Otros temas analizados fueron la asfixia traumática, el manejo en situaciones de desastre y atención al quemado, lesiones por electricidad y rayos, así como el maltrato infantil particular. Las enseñanzas compartidas en este intercambio servirán a los galenos a cargo de este servicio, en la atención primaria de salud.
Los accidentes en el hogar que afectan a niños de entre uno y cinco años, los del tránsito y los del verano, son las causas principales de las lesiones no intencionales, pero la percepción de riesgo es aún baja, por lo cual el Sistema de Salud asume una campaña preventiva junto con las organizaciones de masas y los ministerios del Interior y de Educación.
