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Cuando se desborda el brío guevariano

En Santa Clara, la ciudad que custodia los restos del Che y los de sus compañeros de lucha, se le rindió honores al Guerrillero Heroico este 8 de octubre

Autor:

Nelson García Santos

Santa Clara, Villa Clara.— Si en la mañana el tributo al inolvidable Guerrillero Heroico, en la plaza, fue más íntimo, en la tarde la caminata de los universitarios por la Ruta del Che desbordó esta ciudad, que amaneció impregnada de ese espíritu guevariano de victoria.

La víspera resultó un día donde brotó la añoranza por el inolvidable Comandante, que a 46 años de su caída sigue convocando.

En el Monumento, como de costumbre, fue muy impactante el cambio de flores en el recinto donde reposan sus restos y los de sus compañeros de lucha, y luego, poco más de cien estudiantes de Primaria recibieron los atributos de la Organización de Pioneros José Martí de manos de sus padres y maestros.

Muy cerca de allí, en el Mausoleo a los combatientes del Frente de Las Villas, un grupo de Camilitos realizó la Guardia de Honor como hacen siempre los días 8 y 16 de octubre.

En la caminata, desde la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas hasta el parque Leoncio Vidal, en el corazón de la ciudad, participaron cientos de estudiantes de los centros de Educación Superior, combatientes, Camilitos y pueblo en general.

Al filo de las cuatro de la tarde iniciaron la reedición del recorrido, de poco más de seis kilómetros, efectuado por el Comandante Guevara y su tropa a finales de diciembre de 1958 para atacar las posiciones de la tiranía batistiana en esta urbe.

Los universitarios hicieron un alto durante la marcha para rendir tributo a los primeros mártires de la Batalla de Santa Clara, y también en el Monumento al descarrilamiento del tren blindado de la dictadura.

La Bandera Nacional y la del 26 encabezaron el recorrido, en el cual la reafirmación revolucionaria cobraba vida en las voces de los participantes, en carteles y en los vivas a Fidel y Raúl.

En el apasionado homenaje al Che Guevara brotó también el compromiso de los universitarios con su Revolución, el repudio al bloqueo yanqui y la exigencia de que liberen a Gerardo, Ramón, Antonio y Fernando.

Cuando los integrantes de la marcha llegaron al parque Vidal, donde cientos de personas los aguardaban, vino una apoteosis de satisfacción, porque acababan de recordar al genio de la Batalla de Santa Clara, tan especial para esta tierra que custodia sus restos. Entonces sonó la música del grupo Buena Fe, como colofón de un día memorable.

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