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El proyecto cultural Los Amigos del Amigo en la fortaleza de La Cabaña. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:37 pm
Como a él mismo siempre le gustó estar, rodeado de risas, de canciones, de niños, de amor, se recordó al inolvidable Comandante Hugo Chávez este domingo en la fortaleza de San Carlos de la Cabaña, en La Habana.
Justo después del tradicional cañonazo de las nueve de la noche, el himno cubano y el venezolano dieron paso a las canciones y las palabras de recordación del invicto Comandante Bolivariano.
El embajador de Venezuela en Cuba, Excelentísimo Sr. Edgardo Ramírez abrió el diálogo dándole las gracias a Cuba, y recordando las actividades del día, que incluyeron el homenaje en la sede de la propia embajada, en el pueblo de Jaimanitas con el artista Fuster y en el ultramarino pueblo de Regla.
"Chávez se hizo negro, indio, zambo, mestizo, se hizo amor, pero sobre todo niño y niña", afirmo el embajador, visiblemente emocionado, quien afirmó que por eso estaba especialmente alegre de muchas de las actividades del día, dedicado a recordar el cumpleaños 59 del líder venezolano, "quien está hoy en los niños cubanos, venezolanos, en los del Petare, Sabaneta, en los de África, Asia, del Caribe, de los barrios pobres de Nueva York..."
"Porque Chávez se hizo hombre, se hizo revolucionario, pero nunca dejo de ser niño", agrego el diplomático.
Las palabras del escritor cubano Luis Báez, autor junto a la periodista cubana Rosa Miriam Elizalde, del libro Chávez Nuestro formaron parte del homenaje, organizado por la Unión de Jóvenes Comunistas, donde se recordaron historias, anécdotas y mas allá de la aparente tristeza se volvió a recordar entre risas las ocurrencias de Chávez.
Algunas de ellas, traídas a colación por el periodista Reynaldo Taladrid, como las del juego de pelota entre Chávez y Fidel como manager de sus respectivos equipos, u otras de sus viajes juntos o sus encuentros, formaron parte de una noche entre amigos recordando al Amigo.
Una exposición de carteles y fotografías con el nombre Yo soy un hombre sincero, del siempre invicto Comandante Hugo Chávez, junto a la siempre apreciada por él música de los trovadores, cerró el homenaje de la noche, que ratificó una vez más el llamado del actual presidente venezolano, Nicolás Maduro, cuando llamó a "convertir el dolor y la tristeza en fuerza", como el mejor homenaje que se le puede hacer siempre a Chávez.
