Vista de un audiovisual presentado en la jornada final del IX Congreso de la UPEC en el Palacio de Convenciones, La Habana, Cuba. Autor: Prensa Latina Publicado: 21/09/2017 | 05:36 pm
La Moneda Conmemorativa Aniversario 50 de la Unión de Periodistas de Cuba fue concedida a Fidel y Raúl como ejemplos e impulsores del periodismo revolucionario cubano, en la jornada final del noveno congreso de la organización, celebrada este domingo.
Al recibir la distinción a nombre de ellos, el primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, saludó a los integrantes de la UPEC en nombre del presidente cubano, General de Ejército Raúl Castro.
Díaz-Canel señaló que el Congreso fue un momento importante para analizar la situación de la prensa revolucionaria cubana, y al referirse a la nueva dirección elegida resaltó como su tarea fundamental la de acompañar la construcción de un modelo de prensa cubano que responda a las actuales exigencias de la población y la Revolución.
Creemos en nuestros periodistas y en la Unión de Periodistas de Cuba, contamos con ustedes y con esa joven y madura UPEC que ahora cumple cincuenta años, resaltó el también miembro del Buró Político de Partido Comunista de Cuba.
Compartir una cultura de trabajo que se oriente a la calidad, al orden, la exigencia, la belleza y el apoyo que desde la prensa le hagamos a la construcción del socialismo, es indispensable, porque un periodismo mejor es posible. Esa es nuestra lucha y como siempre en esa lucha venceremos, ratificó Díaz-Canel.
Oyente atento y acucioso en sus anotaciones a lo largo de todo el congreso de los periodistas, el primer vicepresidente cubano llamó a profundizar la relación de la prensa, los organismos, directores y el Partido, para fomentar un debate exigente, no complaciente, comprometido y aportador, como el que se dio en el Congreso, no solo en las discusiones finales, sino las que se sucedieron desde la base.
Al calificar el evento como trascendente por la riqueza de los diálogos entre las diferentes partes, pero también por su aporte al futuro, propuso implementar un sistema de trabajo sistemático, como parte de la estrategia de transformación para la consecución de los cambios que precisa la prensa.
Al respecto, explicó que desde abril ya trabaja una Comisión del Buró Político en una propuesta de política comunicacional para el Gobierno y el Estado, que tendrá una influencia decisiva en el accionar de la prensa.
No obstante, explicó, tenemos que ver estos problemas como parte de los que existen en la comunicación social, así como del necesario reordenamiento y aprobación de las normas jurídicas que correspondan al momento que vivimos.
Con respecto al aseguramiento material necesario para el trabajo de los medios, explicó que en eso están implicados varios organismos de la Administración Central del Estado, y se analizan temas como los de Internet, conectividad, computación, telefonía celular, hospedaje web, distribución de la prensa, señal de televisión y radio, abastecimientos, artes gráficas, traducciones, e incluso vías de autofinanciamiento.
Explicó que se trabaja de conjunto con un grupo asesor para el trabajo de la prensa, que lo integran prestigiosos colegas de los medios, divididos en dos comisiones, una que trabaja en la conceptualización del modelo y el otro en su instrumentación.
Citó como ejemplo de esa estrategia el análisis semanal con los directores de los medios que realiza el Observatorio de la prensa del Comité Central, el cual se ha convertido –aseguró- en un espacio de aprendizaje para todos.
Díaz-Canel llamó a rescatar en la prensa la capacidad de diálogo, de polémica, desde una posición de perfeccionamiento, de respeto, de comprensión hacia los complicados temas de la realidad nacional actual.
En ese sentido resaltó la responsabilidad de la UPEC de fomentar constantemente el papel que debe jugar la prensa cubana en los momentos actuales.
Sobre ello, explicó que en el actual Congreso la discusión no se ha detenido en los logros, sino que ha primado el espíritu de crítica, de insatisfacción con el trabajo de la prensa, pero se ha ejercido con la pasión por la verdad, lo que debe caracterizar siempre la labor de los periodistas y medios revolucionarios cubanos.
La insatisfacción es legítima, pero nadie puede negar el aporte de la prensa a la obra de la prensa revolucionaria, cuya labor tiene que ver mucho con las circunstancias en que se ha desarrollado su accionar a lo largo de los más de cincuenta años de Revolución, que siempre ha tratado de llegar a todos y por el bien de todos, señaló Díaz-Canel.
Al hacer una reseña histórica de cómo la prensa ha ido acompañando a la Revolución a lo largo de la historia, afirmó que es la misma que hoy se le está cuestionando pero no para negar lo hecho, sino para perfeccionarla cada vez más.
Lo que ha hecho la prensa cubana son elementos ya ganados cuando los comparamos con lo que pasa en otros países, incluso en aquellos que desarrollan procesos revolucionarios, que están buscando leyes para posicionarse como voces del pueblo.
Nuestra prensa tiene como virtud que es incómoda para el imperialismo, subrayó, al acotar que por haber denunciado sus mentiras, sus campañas, es odiada por el enemigo, por la contrarrevolución interna y externa, y por eso el tema mediático siempre está presente en todos los intentos por derrocar la Revolución.
Hasta hace poco la prensa cubana era la única en Latinoamérica que denunciaba al imperialismo, y era por ello también la voz de esos oprimidos que no tenían voz.
La cubana no es una prensa que tiene desertores, es un ejemplo de firmeza, de lealtad a la Revolución, a Fidel, a Raúl y al pueblo, sentenció.
Por ello destacó que hoy se confía mucho y se necesita mucho de los periodistas cubanos “para construir ese socialismo próspero y sostenible que tanto queremos y necesitamos”.
Además señaló que a contrapelo de lo que piensan muchos, la gente consume la prensa, ve la televisión, la radio, y hay confianza en ella para denunciar a través de sus espacios las múltiples violaciones que se cometen.
No obstante, subrayó, esa misma sociedad nos pide más, nos exige más, necesita cada vez más de la prensa revolucionaria para que la acompañe en estos momentos que estamos viviendo.
El momento exige analizar desde el punto de vista histórico el impacto de las tecnologías de la comunicación, pues esta es una prensa en tiempo real, por lo tanto hay que cambiar mentalidades, conceptos, revisar lo que nos hemos propuestos, los argumentos de otras épocas, que ahora hay que retomarlos de otra manera, dijo.
En mundo de espionaje electrónico a países, a personas, con amenazas de guerra, la multiplicación del hambre, hay que preguntarse de qué verdades y de qué libertades estamos hablando cuando le hacemos el juego a quienes claman por ello desde el mundo capitalista, se cuestionó Díaz-Canel.
Por ello la mejor manera de contrarrestar esa campaña de desinformación mediática contra Cuba y en especial sus periodistas, reflexionaba el alto dirigente cubano, es reflejar la realidad cubana en toda su diversidad, informar de la obra de la Revolución con sus aciertos y errores, y darle espacios la diversidad de opiniones.
Esto no es solo problema de la prensa, sino del Partido, de los directores de los medios, de los periodistas y de la sociedad en sentido general, y por eso entre todos los vamos a resolver, apuntó.
Sobre el tema de la superación profesional y la formación de periodistas, explicó que si bien hoy tenemos escuelas de periodismo en casi todas las provincias, y se incrementó el numero de graduados, perfeccionaron los planes de estudio, hay ya 16 doctores y un centenar de máster, eso solo indica que no es el mismo momento para reflexionar sobre los problemas comunicativos actuales, ya que se pueden tocar desde un escenario diferente.
Hoy, junto a mantener el principio de que los órganos de prensa son revolucionarios y están en manos de los revolucionarios, debemos entender además que la ausencia de crítica, no hablar de lo que todos están hablando, es algo imperdonable, pues de cada hecho tenemos que dar nuestros argumentos, nuestras visiones, nuestras verdades.
El tema que más irrita y que más nos duele es el de las fuentes y sobre todo la ineficacia para implementar las orientaciones del Buró Político para incrementar la eficacia informativa.
“Nos estamos repitiendo en plantear los problemas, y lo que no hemos encontrado es la manera de resolverlos”, dijo y agregó que se debe accionar de inmediato con las fuentes para acabar con los secretismos innecesarios.
A pesar de ello, reflexionó, también es importante mirarse hacia adentro los propios periodistas y los medios, revisar lo que hacemos, para evitar en vez de informar desinformar, y a su vez desterrar la vieja idea de acomodar a alguien para que piense que para buscar la información y la noticia debe orientarse, pues hay que salir a buscarlas.
Díaz-Canel llamó igualmente a divulgar los resultados del congreso de los periodistas cubanos, “pues nuestra población tiene que saber qué se discutió, cómo se discutió y por qué se discutió.
No debemos temerle a ello, señaló, pues estamos en presencia de una prensa que está con la Revolución, insatisfecha con su accionar y que quiere perfeccionarse, pero siempre fiel.
Por esa razón, alertó sobre la costumbre de algunos funcionarios de ver la prensa y el trabajo de esta no como un aliado para superarse, sino como algo que viene a criticar, a destruir, indeseable, cuando esa es la prensa de la Revolución, del Partido, de nuestro pueblo.
Premios y distinciones de la UPEC
El escritor y periodista Armando Hart, director de la Oficina del Programa Martiano, recibió a su vez la distinción por el medio siglo de la organización periodística; como también le fuera entregada a la colega Marta Rojas, protagonista de incontables coberturas noticiosas en la historia reciente de Cuba.
La Unión de Periodistas de Cuba aprobó declarar como presidentes de honor a Ernesto Vera, fundador de la organización, y al fallecido periodista y profesor Julio García Luis.
Igualmente fue elegido como presidente de honor a Tubal Páez, quien durante más de veinte años dirigiera la UPEC, y se le otorgó el Premio a la Dignidad, que se concede de forma excepcional a quienes constituyen ejemplos y paradigmas de los periodistas cubanos por su trayectoria y servicios distinguidos a la patria.
Al recibir la distinción, Tubal Paéz afirmó que más que a él, era una forma de recuerdo y reconocimiento a todos los compañeros que han dado su vida, y la están dando, por hacer el periodismo que merece el heroico pueblo cubano.
Un momento especial fue la entrega de la Moneda Conmemorativa 50 Aniversario de la Unión de Periodistas de Cuba a Ciro del Río y Heriberto del Río, fundadores junto a otros compañeros, a Fidel y el Che, de la emisora guerrillera Radio Rebelde, creada durante la lucha insurreccional contra el dictador Fulgencio Batista.
Igualmente le fue entregada a Ernesto Vera, fundador de la organización y protagonista de su primer congreso; y a Jorge Risquet, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y uno de los fundadores de la revista Mella, ejemplo de prensa clandestina.
Además fue reconocido con la distinción como ejemplo de corresponsal voluntario el villaclareño José Antonio Fulgueiras; y a Juana Carrasco, en nombre de las decenas de periodistas que han fungido como jurados en los disímiles concursos periodísticos.
Y se le entregó en persona el reconocimiento como Premio Nacional de Periodismo José Martí al colega Jacinto Granda, de Prensa Latina, quien no había podido recibirlo por encontrarse en misión de trabajo en el exterior.
En el acto, la periodista Yitmara Torres recibió un reconocimiento a nombre de los colegas que en Matanzas graduaron este año su primera promoción de nuevos periodistas.
Además hubo reconocimientos a quienes han cumplido misiones en disímiles partes del mundo, ya sea en coberturas de guerras, desastres de todo tipo o en múltiples situaciones, a nombre de los cuales recibió la Moneda Conmemorativa 50 Aniversario de la UPEC el corresponsal Roger Ricardo Luis.
Hubo distinciones para los colegas Juan Marrero y José Martín Pulido, quienes durante varios mandatos formaron parte de la dirección nacional de la organización; así como para Eduardo Vera, a nombre de los trabajadores de aseguramiento de la prensa.
El Palacio de Convenciones, en la persona de su director Abraham Maciques, también recibió la Moneda Conmemorativa por su apoyo a la organización y el desarrollo del trabajo periodístico.
Proyecciones de trabajo
En la última jornada del Congreso se aprobaron igualmente las proyecciones de trabajo de la organización para el período 2013-2018, en las cuales se abordan, entre otros aspectos, la elevación de la calidad de la prensa, la superación de los periodistas, promover la obra de los profesionales más talentosos, así como generar iniciativas que permitan obtener recursos para la propia organización.
Además señala que la prensa continuará denunciando en todas los espacios el rechazo al bloqueo yanqui contra nuestro país, así como continuar la lucha por la libertad de Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio, injustamente prisioneros en cárceles de Estados Unidos.
Igualmente se concretó que la dirección de la organización verificará la marcha de la puesta en práctica de los acuerdos adoptados en el Congreso.
También en la jornada se realizó la presentación del libro “Revolución, Socialismo, Periodismo. La prensa y los periodistas cubanos ante el siglo XXI”, del desaparecido Doctor en Ciencias de la Comunicación Julio García Luis.
Del texto se han editado 5000 ejemplares, los cuales se distribuirán entre los periodistas y los comunicadores del país, los estudiantes y todos aquellos que necesiten conocer los problemas y hacia donde debe transitar el periodismo en Cuba.
Se trata de una obra mayúscula, escrita para ser leída y entendida entre todos, para así buscarle soluciones a los problemas del periodismo actual en Cuba, que tiene raíces históricas, afirmó Rosa Miriam al presentar la primera edición del libro.
Otro momento especial fueron las palabras de Jorge Risquet, miembro del Comité Central del Partido, quien hizo un recuento de sus inicios en la vida periodística, durante la república mediatizada y al frente de la revista Mella, combativa publicación que se enfrentó a las tiranías de turno.
En este sentido pidió hacer un homenaje a aquellos periodistas y publicaciones que se enfrentaron a las dictaduras y denunciaron, a peligro de sus vidas, los desgobiernos de la época.
También los delegados al Congreso conocieron de un mensaje enviado por Juan Carlos Caamaño, presidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP, en la cual felicita a los directivos y miembros de la UPEC por estos 50 años de trabajo al servicio de la Revolución.
En la jornada final se presentó también el número 74 de la revista Temas, dedicada a la Sociedad de la Información y la visión de este fenómeno desde la perspectiva cubana, la cual fue presentada por Antonio Moltó, presidente de la UPEC.