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El trabajo mancomunado de la familia y demás actores sociales resulta fundamental en la prevención. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 04:51 pm
«La prevención es un trabajo multifactorial, donde desempeñan un papel fundamental la familia y la comunidad, y en ello pueden influir los trabajadores sociales. Se trata de transformar las conductas negativas sobre la base de la reinserción social», comentó la teniente coronel Raquel Rielo, del Centro de Investigaciones Socio-Operativas del MININT.
La especialista, una de las asistentes al Taller Nacional de Trabajadores Sociales, que tiene lugar en el Centro de Convenciones Pedagógicas de Cojímar, explicó que si estos elementos vulnerables son tratados a tiempo y se une el trabajo entre todos los factores de la sociedad, pueden evitarse los delitos desde las edades más tempranas.
Este fue uno de los temas abordados durante este miércoles en el referido encuentro, en el cual especialistas del Ministerio del Interior señalaron que las indisciplinas deben ser tratadas en conjunto con las autoridades y los profesionales, desde el hogar, la escuela y la propia comunidad.
Se enfatizó en que la acción de la familia sobre niños y adolescentes y la función educativa de las escuelas son imprescindibles en la prevención de posibles conductas delictivas en los más jóvenes.
El mayor Carlos Borges, del Departamento de Trabajo Comunitario de la Dirección General de la Policía Nacional Revolucionaria, alertó además sobre la necesidad de enfatizar el trabajo con las personas que han sido procesadas por la ley.
