El adiestramiento en Computación es fundamental en estos cursos LAS TUNAS.— Los jóvenes tuneros que cumplen su servicio militar activo, como antesala para su ingreso en la Educación Superior, cuentan desde el año pasado con una alternativa que los tiene en cuenta en el orden académico.
Se trata de una opción que pretende mantenerlos «en forma» con las asignaturas, para que ocupen luego sus pupitres universitarios sin desventajas con respecto a quienes lo hacen de forma directa.
«Este proyecto ha tenido una magnífica acogida entre nuestros soldados con carreras universitarias asignadas», reconoce la primer teniente Cristina Carbonell Jorge, secretaria general del comité UJC de una gran unidad.
«Y no es para menos, porque sus programas les permiten mantenerse vinculados con el estudio durante el tiempo en que cumplen con el deber de prepararse para la defensa de la Patria. Ellos saben que es una gran posibilidad, y la aprovechan con creces», asegura.
Las clases son impartidas todos los sábados por profesores adscriptos al centro universitario Valdimir I. Lenin, de la capital provincial, en el horario de ocho de la mañana a dos de la tarde.
«Usted ni se imagina cuánto me está aportando esta atención docente para mi futuro en la Educación Superior», me comenta el soldado Rosell Reynaldo Hernández, un joven de 18 años que para el próximo curso escolar tiene reservada una plaza en la carrera de Enfermería.
«Aquí uno no se atrasa y está al día. Yo terminé el preuniversitario el año pasado, pero con las clases que ahora recibo me parece estar todavía en la escuela», manifiesta.
Los contenidos docentes que reciben son variados y se corresponden con las especialidades universitarias que les fueron otorgadas.
Los programas prevén materias como Biología, Historia, Matemática, Español, Química, Inglés, Computación... Los futuros maestros y profesores, por ejemplo, se entrenan en Pedagogía, para aproximarlos a su perfil.
«Aquí no solo estudian soldados con carreras asignadas —precisa la primer teniente Cristina—; también están incluidos y atendidos aquellos a quienes se les extendió aval para acogerse a la Orden 18 del Ministro de las FAR. Y le digo algo: su disciplina es impecable.
«¡No hay nada negativo que señalarles! Cumplen con todas sus actividades. Participan en todas las tareas, como la preparación político-ideológica y la militar general. ¿Y sabe una cosa? La mayoría son militantes de la UJC y algunos hasta dirigentes».
«La enseñanza universitaria tunera ha acogido de muy buen grado esta nueva tarea docente, porque sabe lo que significa para el futuro de esos muchachos que hoy cumplen su compromiso con la defensa de la Patria», asegura Recaredo Rodríguez Bosch, metodólogo del centro docente.
«Nuestros profesores desarrollan las clases con gran rigor, entusiasmo y responsabilidad, en coordinación con las FAR. Entre todos continuaremos perfeccionándolas para cursos venideros», explica.
Esta iniciativa que desarrollan las FAR es muestra de la preocupación por el futuro de los jóvenes que se preparan para la defensa de la Patria. Lo corrobora este grupo de jóvenes que hoy ocupa las aulas de una unidad militar para recibir lecciones de verde olivo.