La tecla del duende
«De vez en mes», como canta Arjona, los tecleros de diversas provincias se unen para regalarse tiempo y afecto, esos productos invaluables en la bolsa de rutinas y valores. El fin de semana último, tocó la cita a Holguín, Matanzas y Pinar del Río. Desde Vueltabajo, el trovador y poeta Omar Pérez Aroche nos hizo llegar estos abrazos en voz alta…
Sea usted. Hay gente que el verbo amar lo escribe siempre con mayúscula/ porque al salir al nuevo día/ más que vestirse con caros atuendos/ se viste de amor/ si tropieza, se detiene únicamente/ para quitar la piedra/ halla una tuerca/ y la guarda por si un día tiene un auto/ a menos que usted la necesite/ porque se siente feliz sinceramente de poder serle útil/ ese que es amigo suyo, no de su bolsillo/ aquel que mide los objetos por su utilidad no por su marca/ y las personas por su bondad no por sus objetos/ gente que se ríe de los problemas propios, nunca de los ajenos/ quien no necesita prendas para prendarse ni gritos para hacerse oír/ que no necesita calzar sus razones con altisonancias y malas palabras/ y le respeta: si es y si no es, si tiene y si no tiene, si sabe y si no sabe/ no busque en su rostro a ver si es bello o bella, no sea superficial/ y sea usted esa gente.
Dilema. Llegamos a la vida de un dilema,/ de un sí y un no, de aplomo y aventura/ de paz y guerra, temor y bravura/ de amor y desamor, suerte y problema./ Del silencio del alma o del fonema/ que escoja, soy el dueño por poder/ mas resulta difícil poseer/ concilio y voluntad, paz y respeto/ porque no puede un hombre estar completo/ si en su mente no habita una mujer. (...).
A solas. Ya que eres tan pesada, insoportable,/ amargada como un vaso de hiel/ tan seca como un trozo de papel/ que seas más odiosa es improbable/ ya que eres tan hiriente como un sable,/ que eres más obstinada que las olas/ de tal carácter que me descontrolas/ «chinchúa», lela, terca hasta el abismo/ ven, que voy a esperarte donde mismo/ que nos vamos a odiar un poco a solas.
Grafiti
Mercy: Aunque amanecerá esta vez con la princesa que la vida nos regala, seguirás siendo la reina de mis atardeceres. Tu rey
Mi Venus: Te amo en silencio, desde lo profundo, donde la calma se confunde con el olvido y la apariencia oculta los colores vivos del corazón. Tu astronauta
No seré el hombre que tú sueñas, pero quisiera ser el hombre que te haga soñar. Leodani
JM: No te escribo grafitis para que sepas que te quiero, sino para que sepas que nunca lo dejaré de hacer. Ald
Algún día en cualquier parte, en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a ti mismo, y esa, solo esa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas. Pablo Neruda