Acuse de recibo
El 7 de agosto de 2021, desde Santa Cruz del Sur, Camagüey, Belsi Abreu Lugones contó que es madre de una joven de 33 años con parálisis cerebral, retraso mental severo, epilepsia y debilidad visual; y no pudo trabajar más, se dedicó a su cuidado con ayuda de Asistencia Social.
Los cinco primeros años, decía, la cargaba en brazos, hasta que aprendió a caminar. Y Belsi tenía ya dos vértebras de la cervical comprimidas de tanta fuerza que hizo, además de artrosis cervical. En las crisis, no podía ni levantar los brazos. Y para colmo, vivían solas madre e hija.
Refería que en julio de 2020 rogó a Juana, de Atención a la Población del Gobierno municipal, que tramitara su necesidad de adquirir una lavadora. Esta le pidió un número de teléfono para llamarla, y nunca le dio respuesta.
«Ahora en 2021, decía, vuelvo a solicitar ayuda para que me valoren la lavadora en moneda nacional, pues es la única entrada económica que tengo, de una chequera que me da Asistencia Social. Hoy 6 de agosto fue la última vez que hablé con Niurka, de Atención a la Población del Gobierno, desde mayo que estoy pidiendo de favor que valoren mi caso.
«Mi hija es como si fuera un bebé: se orina y defeca en la ropa, que tengo que lavar primero con bastante jabón, luego pasarla por agua con cloro, y por último agua y jabón otra vez», concluía.
El 5 de septiembre de 2021 Belsi agradeció aquí la publicación del caso, pues a partir de ello la visitaron el Intendente, la Directora de Asistencia Social y la funcionaria de Atención a la Población del Gobierno municipal. Y el 12 de enero pasado revelé la tercera carta de Belsi, en la que dice que tras la visita del Gobierno y Asistencia Social no hubo solución de la lavadora. Y la situación empeora con los mareos que sufre. La Directora de Asistencia Social en el municipio le había dicho que entregó todo en la provincia, con número de acuerdo, y le correspondía al CAM hacer los trámites.
Responden ahora Yurisleidis Sánchez Cajigal, directora de Trabajo y Seguridad Social de Santa Cruz del Sur; y Juana Martínez Martínez, técnica de Atención a la Población del Consejo de Administración Municipal. Y señalan que lo señalado por Belsi se analizó por la dirección del Gobierno municipal y los organismos implicados.
Se confirmó, dicen, que es beneficiaria de Asistencia Social, con prestación de 2 626 pesos. Ha sido beneficiada por la Dirección Municipal de Trabajo y el Gobierno Municipal con módulo de cocina de inducción, un colchón camero, avituallamiento de sábanas y toallas, módulos de alimentos y aseo reiteradamente. Y se les construyó una vivienda a través de un subsidio aprobado por el CAM.
«Es cierto, dice, que solicitó una lavadora en 2021 a Trabajo y Seguridad Social, se hicieron los trámites correspondientes; y la asignación de ese recurso fue aprobada de manera excepcional. La solicitud fue llevada y aprobada en el CAM con número de acuerdo 386/2021».
Precisan que la Directora Municipal de Trabajo hizo la solicitud a la Empresa de Comercio Provincial, y se le explicó que ese recurso ya no se vende en moneda nacional; que en caso de que existiera un decomiso de una lavadora se le podría asignar, lo cual no ha sucedido hasta la fecha.
«Actualmente, agregan, se debe proceder a iniciar nuevamente los trámites que corresponden, tanto la actualización por la ciudadana de los documentos, como por la Dirección de Trabajo y Seguridad Social en el municipio, que debe presentar al CAM una nueva solicitud para que sea evaluada y buscar una solución.
«No obstante, dicen, se ha dado tratamiento a la situación de la compañera a través de las visitas a su hogar. Además, su queja está recepcionada en la oficina de Atención a la Población del Gobierno Municipal y en la Dirección Municipal de Trabajo y Seguridad Social.
«Si en algún momento se aprobara vender equipos electrodomésticos como se ha informado, y entraran lavadoras por esa vía de crédito en moneda nacional, el caso de Belsi Abreu Lugones, sería prioridad. Fue visitada, y Belsi planteó no estar conforme con la respuesta dada, pues lo que ella necesita es una lavadora. La queja clasifica con razón y pendiente de solución», termina.
Agradezco la respuesta, así como toda la ayuda anterior que se le ha brindado a esa familia muy vulnerable. Pero esa lavadora no es un lujo para esa madre desgastada. Mientras vivamos en medio de condiciones tan difíciles, la salida no puede ser seguir esperando por una posibilidad que no llega. ¿No puede haber un tratamiento diferenciado o una alternativa para casos tan excepcionales como los brazos exhaustos de Belsi?