Acuse de recibo
Conexión. Tal era el reclamo que desde Camino de la Isla s/n, Batey Central Cristino Naranjo, Cacocum, Holguín, hacía Martha Leyva López, a nombre suyo y de los demás lugareños, el 2 de agosto de 2016.
Tenemos extrema necesidad de un teléfono, aunque sea de minutos, que sirva para los vecinos del área, sostenía la remitente, quien además encabeza su CDR. Añadía que la inquietud había sido planteada infructuosamente varias veces.
Al respecto contesta Mariela Cruz Herrera, presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular (AMPP) en Cacocum. Argumenta la Presidenta que se contactó a Abilio Jiménez López, jefe del Centro de Telecomunicaciones del municipio Cacocum, quien los remitió a Iliana Fernández, especialista en Relaciones Públicas de la Dirección Territorial de Etecsa en la provincia de Holguín.
«Se realizó comunicación vía telefónica con la compañera Iliana Fernández, quien refiere que el mecanismo establecido por Etecsa para dar tratamiento y ofrecer respuesta a los casos publicados en los medios de prensa transitan por trámites que realiza el Departamento Nacional de Protección al Consumidor que atiende estos asuntos, el cual remite la queja al Departamento de Relaciones Públicas de la provincia implicada».
Esta última dependencia se encarga de las investigaciones pertinentes, de conjunto con la Dirección del Centro de Telecomunicaciones del municipio correspondiente, se envía respuesta al Departamento Nacional de Protección al Consumidor, y esta instancia es la que brinda entonces respuesta a la prensa, detalla la dirigente, citando a la funcionaria empresarial.
«Se informó de lo sucedido a la Dirección Provincial de Etecsa, para que con la mayor brevedad posible ofrezca tratamiento y respuesta a la queja. La compañera Iliana Fernández (...) le comunicó a la presidenta de la AMPP de Cacocum que le va a dar respuesta a la promovente y a la prensa», afirma Mariela. Y cierra su misiva pidiendo se considere la queja pendiente de respuesta por Etecsa y no por el Poder Popular del municipio.
Esta respuesta, que agradezco, llegó a JR el 18 de enero de 2017. No menciona si se informó al remitente de la queja, paso elemental ante cualquier reclamo. Por su contenido, el redactor puede inferir, además, que la (in)comunicación del batey está en manos de la empresa de telecomunicaciones, toda vez que el Gobierno local ha dejado la pelota en su cancha, para decirlo en buen cubano. Al redactar estas líneas, más de siete meses después de publicado el SOS desde el batey, Etecsa no ha contestado ni una palabra sobre el reclamo.
Sin desconocer la necesidad de «la lucha» para la sobrevivencia cotidiana, el camagüeyano Julián Cardoso Ramos (Crucero de Piedrecita, Los Maguelles No.7, Céspedes, Camagüey) se quejaba aquí el 17 de enero último de que los vagones de los trenes números 501 y 502, en el recorrido Morón-Camagüey, suelen transitar incómodamente llenos de sacos de viandas y animales.
A propósito contesta Enrique Valdés Abreu, director de la Empresa de Ferrocarriles Centro Este. Comienza admitiendo la razón que asiste al ciudadano, aunque desde hace algún tiempo se ejecutan acciones para eliminar los referidos problemas en la provincia de Ciego de Ávila.
Ante esta alerta concreta, se decidió: «Incrementar los operativos coordinados por la PNR, la Policía Ferroviaria y los miembros del Consejo de Dirección, a los trenes de manera sorpresiva en diferentes momentos de su itinerario; intensificar las discusiones con las tripulaciones y realizar análisis objetivos sobre la situación que presenta cada tren, con el fin de laborar unidos para erradicar las indisciplinas sociales y trabajar en el mejoramiento del confort de los coches que se utilizan en este servicio», refiere el directivo.
Apunta que la respuesta no fue notificada al lector, porque este no reside actualmente en la dirección que se publicó. También señala la misiva, que agradecemos, la responsabilidad social que toca en dificultades de este cariz. Seamos un tilín más disciplinados, podríamos añadir, parafraseando al trovador.