El acople de los 14 atletas de la isla dio como resultado una actuación superior a la de Barranquilla. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 28/06/2023 | 08:39 pm
San Salvador—. Los judocas cubanos dominaron con agarres sólidos y proyecciones precisas los tatamis de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023 (JCC). En el Coliseo de la Universidad de El Salvador, los atletas liderados por Yordanis Arencibia por el sector femenino y Julio Alderete en la parte masculina sacaron nueve títulos, par de platas y dos bronces que revalidaron la primacía por países obtenida hace cinco años en Barranquilla, en donde el saldo fue de ocho, tres y seis, respectivamente.
La actuación de deportistas consolidados como Idalys Ortiz, Iván Silva, Kaliema Antomarchi, Andy Granda y Magdiel Estrada, más el ascenso de jóvenes como Orlando Polanco, Arnaes Odelín e incluso Idelannis Gómez, demostró el buen estado de forma de un deporte fundamental para Cuba en juegos múltiples.
«Vinimos enfocados en ganar los JCC tanto en el individual como el por equipos, y todo se dio para que lo lográramos. Los resultados, en forma general, se han logrado no solo en los apartados físico y técnico, sino también en el sicológico, pues sabíamos que era un escenario un poquito complicado en los que el arbitraje, como siempre, nos llevaría bien tenso. De hecho, hubo combates en los que decisiones incorrectas nos llevaron a tener resultados diferentes a lo que esperábamos», declaró Arencibia.
Según el profesor, otrora bronce olímpico en Atenas y Beijing, lo que nunca faltó fue la entrega, que para él es el factor fundamental del cual salen los resultados.
«Si miramos hacia el futuro de este equipo con el ciclo que cierra en París, podemos decir que llegará un plantel con mucho crecimiento que junta a atletas experimentadas con otras figuras en ascenso. Tenemos un grupo de atletas muy fuerte, las cuales están buscando sumar unidades rumbo a la olimpiada, mientras que aparecen también figuras jóvenes que poco a poco se van fogueando internacionalmente para continuar creciendo. Nuestra intención no son solo las olimpiadas, sino los eventos que seguirán llegando después, para los cuales habrá que seguir sumando juventud y experiencia, de forma que podamos continuar dominando un área como la centrocaribeña, que cada vez se vuelve más difícil», concluyó Yordanis.
Por su parte, Alderete puso en valor el hecho de haber mantenido la supremacía a pesar de haber cuatro oros menos en disputa, pues en Barranquilla se compitió en una división más por cada sexo (44 kg F y 55 kg M) y además los torneos colectivos se hicieron por separado y no de forma mixta como ahora. No obstante, también dejó claro que conformarse nunca ha sido una opción.
«Nosotros siempre vamos a buscar una mejoría en los resultados. Este es un año atípico, en donde ya estuvimos en los Juegos del Alba, ahora en los JCC y luego tendremos los Juegos Panamericanos, sin contar el cercano abierto continental de Ecuador, adonde iremos en busca de puntos para el escalafón de París 2024.
«Tenemos un equipo joven que lleva ya unos cuantos años compitiendo al más alto nivel. Como los más experimentados están Iván Silva, Jorge Martínez, Magdiel Estrada y Andy Granda, pero ahí se suman ya Orlando Polanco y Liester Cardona como dos figuras que vienen en ascenso y buscan estabilizar sus resultados cada vez más. Sin duda podemos decir que tenemos garantizado el relevo no solo de la primera categoría sino también la cantera juvenil que está saliendo en las provincias. Paralelamente a eso, estamos trabajando para ver si se reactiva la Escuela Superior de Perfeccionamiento Atlético (ESPA) para no perder tantos talentos. Actualmente pasa que muchos atletas se desmotivan y se apartan del deporte, fenómeno que estamos intentando frenar. Conservar esa cantera es fundamental para que el judo cubano mantenga ese escalón intermedio entre los equipos nacionales y las categorías de formación, que siempre fue la ESPA».
Tras sus éxitos en la capital salvadoreña, ahora los equipos de judo de ambos sexos salieron directamente de la actual sede del deporte centrocaribeño rumbo a Guayaquil, Ecuador, sede del Abierto Panamericano de la disciplina que otorgará a los participantes hasta 500 puntos para el ranking olímpico.