Marcel Hernández es uno de los que podría incorporarse próximamente a la convocatoria nacional. Autor: Tomada de La Nación Publicado: 30/01/2021 | 08:00 pm
El 2021 ha comenzado y casi al cierre de este primer mes toca analizar la realidad del fútbol, uno de los deportes que más polémica y pasión genera entre los aficionados de toda Cuba.
En primer lugar, debemos decir que la realidad de nuestro balompié durante los últimos dos años ha sido tan desalentadora que actualmente hay pocos que apostamos por un cambio en esta. Ahora mismo, esta es una disciplina que debe remar a contracorriente y de forma sumamente intensa si es que desea salir de la masiva fosa en que se encuentra metida.
Si 2019 tuvo un comienzo dulce, con aquella clasificación a la Copa Oro y a la máxima categoría de la Liga de las Naciones de Concacaf, la alegría terminó poco después de ver las actuaciones de los Leones del Caribe en ambas lides.
A nivel local, el cambio de formato en el torneo, con la creación del Apertura y el Clausura, sí favoreció más la imagen que se tenía. Creció la competitividad y ciertamente el cierre de la primera parte, con la sorprendente coronación de Pinar del Río, fue algo positivo en términos generales.
Sin embargo, el 2020 y la llegada de la COVID-19 frustraron por un lado la definición del segundo segmento de la competición local y también terminó con cualquier esperanza de ver a Cuba en su camino rumbo a Catar 2022.
Afortunadamente, ya se puede comenzar a ver una tenue luz al final del túnel y el calendario de este año en curso es una de las noticias más alentadoras que podemos mencionar.
Aunque no se espera un regreso de la Liga Nacional de Fútbol a corto o mediano plazos, sí tendremos fechas FIFA que al menos nos permitirán ver en acción al once patrio en cuatro oportunidades.
Tan pronto como el 24 de marzo, Cuba debutará en las eliminatorias como visitante frente a Guatemala y cuatro días más tarde será local —en una sede aún por definirse— contra Curazao, el gran favorito del grupo C para avanzar a la siguiente ronda de la clasificación mundialista.
En junio tendrá lugar el cierre de esta fase para los —actualmente— dirigidos por el pinareño Pablo Elier Sánchez, cuando se midan los días 2 y 8 con Islas Vírgenes Británicas (local) y luego a domicilio ante San Vicente y las Granadinas.
Por supuesto que el reto de clasificar a la siguiente etapa es enorme, y luego ahí vencer al rival de turno —que debería ser Panamá— es algo, incluso, más complicado. No obstante, tocará ver qué sucede y luego sacar las conclusiones que sean pertinentes.
Si hay algo que más allá de los resultados preocupa a los seguidores del más universal en el Archipiélago más grande de las Antillas, es el asunto de las convocatorias a jugadores que se desempeñan en ligas foráneas de forma independiente.
Ya la Asociación ha declarado sus intenciones de contar con un quinteto de hombres que integran Marcel Hernández (LD Alajuelense), Onel Hernández (Norwich City), Carlos Alberto Vázquez, también conocido como Cavafe (CDA Navalcarnero), Jorge Luis Corrales (agente libre) y Joel Apezteguía (SP Tre Fiori), pero es algo que deberá confirmarse cuando el técnico Sánchez dé a conocer su próximo llamado.
Sea como sea, por bien que veamos esa decisión, tampoco significaría un cambio sustancial en lo que respecta al porvenir del deporte. Para ello se necesitan transformar métodos de trabajo, infraestructura y sobre todo la mentalidad de los principales decisores.
El primer paso de avance fue la consulta popular que se realizó en todas las provincias del país durante el cierre del pasado año. Ahí se debatieron muchos aspectos vinculados con el balompié cubano y existe la esperanza —además de la necesidad— de que sus resultados sean palpables lo antes posible.