Mesut Özil celebra el triunfo. Autor: El País Publicado: 21/09/2017 | 05:26 pm
El Real Madrid rescató hoy un punto en el último suspiro del partido al empatar 2-2 en casa con el Borussia Dortmund en el Grupo D de la Liga de Campeones de Fútbol, que queda muy abierto a falta de dos fechas para el final.
Marco Reus y Mario Götze anotaron para los alemanes, que lideran la zona con ocho puntos, mientras que Pepe y Mesut Özil fueron los autores de los goles locales en el Santiago Bernabéu. El del volante «merengue» fue en el minuto 88, para negociar el empate.
La ausencia de Marcelo lo ha convertido en un conjunto más previsible, y también más vulnerable. La lesión del brasileño ha desplazado a Sergio Ramos a una banda y el centro de la defensa se ha resentido.
El francés Raphael Varane todavía no es el central que promete ser y el polaco Robert Lewandowski lo aprovechó en la primera mitad. Los goles no fueron suyos, pero sí las dos prolongaciones con la cabeza que habilitaron a sus compañeros.
La primera fue tras una larga jugada germana. El "9" del Dortmund dejó solo a Reus y el rubio centrocampista disparó duro con la derecha. Iker Casillas pudo quizá hacer más, pero el balón terminó en la red. Era el minuto 27.
La segunda demostró que el 1-0 no fue una casualidad. El campeón de la Bundesliga es un equipo trabajado, que sabe lo que quiere y cómo lograrlo: filas juntas, presión adelantada y un contragolpe mortal de la mano de talentos como Grosskreutz y G tze, que tocó lo justo en el último segundo de la primera parte para elevar el balón ante la salida de Casillas y marcar el segundo tanto visitante.
El gol de Pepe, en el 33, fue un espejismo. El central portugués cabeceó un centro de Mesut zil para hacer el 1-1, pero el Madrid no funcionaba.
El argentino Gonzalo Higuaín, muy desdibujado y con claras molestias físicas, y el croata Luka Modric, insustancial en el centro del campo, fueron sacrificados por Mourinho en el descanso. En su lugar entraron José Callejón y Michael Essien.
El equipo local ganó en estabilidad y agresividad. Callejó marcó casi en el primer balón que tocó, pero el gol fue anulado por fuera de juego. El español volvió a tener el empate en sus piernas poco después, pero su disparo se fue rozando el poste.
Fueron los mejores minutos del Madrid. El Dortmund dio un paso atrás a la espera de ese contraataque que matara definitivamente el partido, pero los hombres de Klopp se centraron más en defender su ventaja que en buscar el tercero.
El Real Madrid se hizo dueño del juego, pero sin demasiada precisión. Kaká fue el último cartucho de Mourinho. El brasileño entró a falta de un cuarto de hora por el lateral lvaro Arbeloa y de sus botas nació la mejor oportunidad blanca hasta el momento.
El ocho blanco se llevó el balón de rebote por el carril central, abrió a la derecha para Di María y su centro lo remató a dos metros de la portería Cristiano Ronaldo. Weidenfeller se tiró al bulto, pero acertó y la pelota se fue fuera.
A falta de cinco minutos, Callejón volvió a tener el empate a su alcance, pero su remate flojo, a la media vuelta, lo sacó un defensa justo en la raya de gol.
Los esfuerzos del Madrid eran inconexos, más fruto de la improvisación que de un plan definido, pero la calidad de la plantilla blanca está fuera de toda duda. A dos minutos del final, zil demostró porque su pierna izquierda está considerada de las mejores del mundo.
Por una vez, Cristiano cedió un falta a un compañero y el alemán no lo desaprovechó. Puso el balón en un lugar imposible, por encima de la barrera, en el ángulo inferior del arco. Un 2-2 que deja abierto de par en par el Grupo D, el Grupo de la Muerte.
REAL MADRID: Casillas; Ramos, Varane, Pepe, Arbeloa (Kaka); Alonso, Modric (Callejón), Özil, Di María; Cristiano Ronaldo e Higuaín (Essien).
BORUSSIA DORTMUND: Weidenfeller; Piszczek, Subotic, Hummels, Schmelzer; Gündogan (Perisic), Kehl, Götze (Leitner), Grosskreutz, Reus (Bender); y Lewandowski. (DPA)