Idalys abrió el camino para las muchachas. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 05:14 pm
GUADALAJARA.— Un inicio de lujo tuvo el judo cubano este miércoles con dos medallas de oro y una de plata en el Complejo Deportivo II de esta ciudad.
Primero, se enganchó en un endiablado combate con el brasileño Rafael Carlos da Silva, en la división de más de 100 kilogramos. El cubano trabajó muy bien al sudamericano, y logró inclinar la balanza a su favor con un wazari.
«El brasileño es un rival muy fuerte. Lo conozco por haberlo enfrentado antes y ya lo tenía estudiado. Por eso seguí mi estrategia muy cuidadosamente para evitar sorpresas e imponerme. Mi objetivo era el título, y va dedicado para mi gente de Camagüey», señaló Brayson aún empapado de sudor por el esfuerzo realizado.
Para llegar a la final, el criollo ganó primero al boricua Pablo Figueroa, y luego sacó de competencia al colombiano Luis Ignasio Salazar. En esta división las medallas de bronce fueron para el estadounidense Anthony Turner y el propio Figueroa.
En la segunda final de la jornada vimos otra batalla Cuba-Brasil. Esta vez el combate por el título en los 100 kilogramos lo protagonizaron el criollo Oreydis Despaigne y el carioca Luciano Correa.
Y nuevamente presenciamos un combate bien parejo, tanto que tuvieron que irse al tiempo reglamentario. Allí al cubano le faltó quizá un poco de oxígeno, y logró imponerse el brasileño al sacarlo dos veces del área de combate, en una decisión que correspondió a los jueces.
Si bien Oreydis pudo haber hecho más por la pelea, a lo mejor no le tocaba a los venerables decidir el título, sobre todo cuando la lucha por el segundo lugar de los Juegos va tan pareja entre ambas naciones.
Por supuesto, Oreydis no se fue conforme, ya que aspiraba a discutir hasta el último segundo el título continental ante un rival que tiene resultados mundiales destacados, como el primer lugar en el campeonato del orbe en 2007.
Finalmente, y contrario a lo que reza el refrán, tocó el turno a las damas. Idalys Ortiz fue la encargada de defender al verde caimán, ante la puertorriqueña Melissa Mojica.
La boricua había llegado a este tramo tras derrotar espectacularmente por ippón a la brasileña María Altheman, pero no pudo nunca con la cubana. Idalys fue rápida y precisa en su técnica, para llevarse la victoria por ippón antes del cierre del tiempo reglamentario.
Así, debutó en citas continentales por todo lo alto esta muchacha de sonrisa sempiterna. «Sabía que podía ganar, me había preparado fuerte para esto y hoy lo logré. Estoy muy contenta y ahora a prepararme más fuerte para el futuro», confesó.
Hoy el judo tiene previstas finales en 70 y 78 kilogramos para damas, además de los combates varoniles en 81 y 90 kilos.