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Las cubanas debutarán este martes frente a Panamá. Autor: FIVB Publicado: 21/09/2017 | 05:12 pm
Si a la final del presente Grand Prix de voleibol femenino se llegara tras la primera vuelta, la escuadra cubana estaría clasificada. Pero resulta que para avanzar hacia el último tramo del torneo falta un buen trecho, y mucho tendrán que mejorar nuestras muchachas para mantenerse en el selecto grupo de siete elencos que acompañarán a las anfitrionas chinas en la disputa del cetro.
Después de concluida la ronda inicial, las cubanitas formaban el sexto mejor equipo, con una mínima diferencia sobre las polacas. Ambas selecciones acumulan cuatro unidades gracias a un único triunfo en tres salidas, pero una de sus dos derrotas ocurrió en cinco sets y esto les reportó una unidad. También similar es el average de sets ganados y perdidos —seis y seis para cada uno—, por lo que la distancia quedó establecida en el promedio de puntos, con 1.000 para las criollitas y 0.955 de las europeas.
Por delante marchan las invictas representaciones de Italia, Brasil y Estados Unidos, acompañadas hasta el momento por las escuadras de Japón y Serbia.
Visto así, no parece tan malo el debut de las discípulas de Juan Carlos Gala, pero indudablemente debió ser mucho mejor porque la derrota frente a las tailandesas no estaba en los planes. Y después de salir con ventaja de dos sets, la victoria parecía más que cantada.
Pero como agua pasada no mueve molinos, la vista ya está puesta en la próxima incursión que se iniciará mañana en Zielona Gora, Polonia, donde las actuales Morenas del Caribe debutarán frente a Corea del Sur, antes de medirse con las argentinas y las locales.
Las asiáticas hicieron de locales durante el primer segmento, y consiguieron un importante triunfo por 3-1 sobre Alemania previo a sus derrotas por barrida ante japonesas y brasileñas. Por su parte, las gauchas compartieron cartel con las polacas y también se apuntaron un triunfo, este un poco sorpresivo frente a República Dominicana en cinco mangas.
Así, muy parejo se presentan los próximos enfrentamientos, en los que el equipo cubano debe mejorar su desempeño colectivo, sobre todo en el recibo. Individualmente, han sido hasta ahora Yoana Palacios y Wilma Salas quienes tiran de la ofensiva, para paliar un poco el discreto arranque de Kenia Carcasés con solo 24 puntos.
Ninguna jugadora ha sido más efectiva en el ataque que Palacios, quien además marcha segunda entre las máximas anotadoras del certamen a solo nueve rayitas de los 64 puntos anotados por la líder sudcoreana Yeong-Koung Kim. A su vez, Wilma es sexta en el listado de máximas artilleras, es séptima en efectividad, y sus ocho aces la ubican como la cuarta mejor desde la línea de servicios.
También las cubanas han hecho lo suyo en el bloqueo, encabezadas por Rosanna Giel —décima en ese escalafón—, en contraste con la defensa de campo, que junto a la recepción sigue como asignatura pendiente del voleibol cubano en general.
De cuánto puedan aportar estas y otras jugadoras a la causa depende la presencia en Macao para intentar acercarnos al podio. En la tercera fase repetimos frente a tailandesas y argentinas, además de enfrentar el difícil duelo con las brasileñas. Sumar ahora es la clave para no salirnos de zona.
