BEIJING.— La historia del voleibol femenino cubano sigue sumando gloriosos capítulos. En el más reciente, las Morenas del Caribe molieron a China 3-2 y poco a poco se van confirmando como fuertes aspirantes al cetro olímpico en esta ciudad.
Una vez más, el inicio del juego fue para olvidar. En apenas unos minutos, la entusiasta afición disfrutaba por todo lo alto, en tanto las cubanas fallaban una y otra vez para ceder en el primer parcial por abultado marcador de 25-18.
El segundo set fue más de lo mismo. Mientras las locales rozaban la perfección en todos los aspectos de juego, nuestras muchachas no encontraban el rumbo, y cada intento de revertir el marcador se diluía en una mera escaramuza. Otra «paliza» de 25-14 en apenas 20 minutos era la prueba de que la buena fortuna nos viraba la espalda.
Pero entonces salieron a relucir «el coraje y la intransigencia con la derrota», aspectos que al final del partido Ñico Perdomo señalara como las claves para lograr una épica remontada. Y no le falta razón, pues a medida que avanzó el tercer parcial, sus discípulas se convencieron de que la nave china, a pesar de sus impecables movimientos, podía hundirse ante la incredulidad de sus miles de delirantes seguidores.
Rosir Calderón envuelta en una velada extraordinaria —26 puntos—, junto a la siempre efectiva capitana Yumilka Ruiz, tiraron del grupo en el triunfo parcial de 25-23. Ya se veía una luz al final del camino.
«Comenzó a funcionar el ataque por la zona tres», fue la explicación del experimentado profesor Eugenio George, al analizar el funcionamiento del equipo cubano a partir de ese momento. Llegó entonces una mejoría ostensible en la defensa y la concentración se enseñoreó en la mente de las jugadoras cubanas. Lo que parecía un milagro se hizo realidad en el cuarto sets, con ambos equipos enfrascados en un delirante duelo punto por punto, cuyo desenlace 32-30 a nuestro favor dejó la escena lista para la consagración.
Cuando la pizarra reflejó el 15-13 definitorio, se desató la locura. El graderío tuvo que reconocer la bravura, la entrega, y la perseverancia de las Morenas, quienes se llevaron los aplausos y quedaron con la satisfacción del deber cumplido. «Fue un juego muy lindo, y supimos crecernos para lograr la victoria», dijo Yumilka al tratar de resumir lo vivido durante las casi dos horas que duró el apasionante enfrentamiento.
El triunfo es, sin dudas, un importante paso en la ruta para llegar al podio, y luego luchar por el cetro. Psicológicamente representa un estímulo crucial antes del duelo de mañana con las japonesas, el último escalón en el camino hacia el liderazgo del grupo A. En el rival del cruce no se piensa aún. Cuando se tiene espíritu de victoria, no hay margen a las especulaciones.
Otros resultadosEn otro partido de la zona A, Estados Unidos superó a Venezuela 3-1 (25-17, 20-25, 25-14 y 25-18). Además, Japón venció a Polonia 3-2 (25-21, 25-20, 18-25, 23-25 y 15-11).
Mientras, en la llave B, Brasil barrió a Serbia 3-0 (25-15, 25-13 y 25-23), e Italia hizo lo mismo con Argelia (25-7, 25-20 y 25-12). Por último, Rusia respiró ante Kazajstán 3-0 (25-19, 25-18 y 25-11).