Con las actuaciones de Dayron Robles y la multilaureada selección de béisbol, Cuba debe llevar la voz cantante por América en la cita estival. BEIJING.— Aunque sea una verdad de perogrullo, no es ocioso volver a recordarlo: Cuba es el único país latinoamericano capaz de competir con las grandes potencias en el escenario olímpico. A pesar de la marea alta y los fríos vientos del norte, la nave antillana desplegará nuevamente sus velas dentro de unos días en esta bella ciudad. Póngale el cuño.
Los analistas de Sport Illustrated, la prestigiosa publicación especializada en temas deportivos, lanzaron su tradicional pronóstico previo a los Juegos Olímpicos y ubican a nuestro país en el octavo lugar del medallero. Ellos nos auguran 11 preseas de oro, 5 de plata y 13 de bronce, solamente por detrás de países ricos: China (49-28-25), Estados Unidos (45-44-32), Rusia (25-28-22), Australia (22-14-18), Alemania (15-16-17), Inglaterra (12-15-8) y Francia (12-9-17).
El tiempo, como siempre, pone las cosas en su lugar. Hace solo dos años, durante los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Cartagena de Indias, México protagonizó una insólita rebelión y muchos vaticinaron una crisis en el deporte cubano.
Sin embargo, los aztecas se instalaron este sábado en la Villa Olímpica con modestas pretensiones y objetivos muy distantes de los que tiene ahora la mayor isla del Caribe. Sus 83 competidores —Cuba inscribió a 165— tienen pocas esperanzas de alcanzar una medalla.
La máxima figura mexicana en los últimos años, la velocista Ana Guevara, anunció su retiro hace unos meses. Por la misma causa tampoco vino a Beijing la ciclista Belem Guerrero, en tanto sus restantes medallistas en Atenas 2004, los taekwondocas Oscar e Iridia Salazar, no clasificaron esta vez.
Así, les quedan pocas ilusiones: la clavadista Paola Espinosa, la taekwondoca María Espinoza, el canoísta Cristóbal Quirino y el marchista Eder Sánchez. Todas se cuentan con los dedos de una mano.
En cambio, Cuba puede efectivamente superar la decena de títulos. Cartas de fuerza hay bajo la manga como Dayron Robles (110 metros con vallas), Yargelis Savigne (triple salto), Yipsi Moreno (martillo) y Osleidys Menéndez (jabalina) en el atletismo; los luchadores Mijaín López (120 kg, greco) y Yandro Quintana (60 kg, libre); los taekwondocas Gessler Viera (67 kg) y Ángel Valodia Matos (más de 80 kg); los judocas Yordanis Arencibia (66 kg), Yanet Bermoy (48 kg) y Driulis González (63 kg); los boxeadores Yordenis Ugás (60 kg) y Osmay Acosta (91 kg); la ciclista Yoanka González; los pesistas Sergio Álvarez (48 kg) y Yoandris Hernández (94 kg); y los equipos de béisbol y voleibol femenino.
La corriente de RíoSuperado el «fantasma» de Cartagena, los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro volvieron a poner a prueba a los atletas cubanos. Y de nuevo se aprobó el examen con altas notas, dejando a los anfitriones brasileños con las ganas de saborear el segundo lugar por naciones.
Un año después, el gigante sudamericano ha traído a Beijing la mayor comitiva de su historia: 272 atletas. Además, unos 21 entrenadores extranjeros orientan y coordinan la preparación de los deportistas brasileños, según declaró hace unos días el jefe de la delegación, Marcus Vinicius Freire.
No obstante, sus aspiraciones son moderadas: superar las cinco medallas de oro alcanzadas en Atenas 2004. Para ello cuentan con estrellas como el bicampeón olímpico de vela Robert Scheidt, el triplista Jadel Gregorio, los judocas Joao Derly y Luciano Correa, los nadadores Thiago Pereira y César Cielo y el gimnasta Diego Hypólito. También apuestan con fuerza a los equipos de voleibol y fútbol, y al colectivo de equitación.
De todas formas, siete coronas sería un número mágico para ellos y llegar a diez parece una quimera. No creo que lo consigan.
Goles son amoresMás abajo en la geografía olímpica del continente, Argentina sueña con los goles de Lionel Messi y Luciana Aymar, junto a las canastas de Manu Ginóbili.
Con una plantilla de lujo donde sobresalen además Juan Román Riquelme y Sergio Agüero, la selección albiceleste es la favorita para retener el cetro que alcanzó hace cuatro años en el fútbol. En principio, tienen un grupo asequible —Costa de Marfil, Australia y Serbia— y todo parece indicar que podrían disputar la final contra Brasil.
Mientras, las «leonas» del hockey sobre césped pertenecen a la élite mundial y acarician un gran resultado desde hace rato. En cuanto al baloncesto, lograron reunir de nuevo a Ginóbili, Fabricio Oberto, Luis Scola, Carlos Delfino y Andrés Nocioni, así que darán la pelea por regresar a lo más alto del podio.
Argentina, que inscribió a 138 atletas, sueña además con buenas actuaciones del tenista David Nalbandián, la nadadora Georgina Bardach, el velero Santiago Spínola, la judoca Daniela Krupower, los ciclistas Juan Curuchet y Walter Pérez, el garrochista Germán Chiaraviglio y la pareja de Martín Conde y Alejandro Baracetti en el voli de playa.
Viene un huracánTal vez ahora se vaya por debajo y no afecte los cimientos del medallero olímpico, pero Venezuela ya despertó y será un huracán dentro de cuatro años.
Con 109 deportistas inscritos —duplica su anterior récord histórico—, muy fácil les será a los morochos superar las dos medallas de bronce que alcanzaron en Atenas. Incluso, alguno pudiera emular con el boxeador «Morochito» Rodríguez, quien logró en 1968 el único título olímpico de la gran nación bolivariana.
Tales son los casos del espadachín Silvio Fernández, la luchadora Maryelis Caripa y los boxeadores Alfonso Blanco (75 kg) y Héctor Manzanilla (54 kg). O quizá el equipo de softbol femenino, sorprendente abanderado de la delegación.
Café caliente y otros estimulantesTambién con sus mejores números —68 atletas, más que nunca antes—, Colombia llega ilusionada a los Juegos de Beijing.
Los ciclistas María Luisa Calle y Santiago Botero, el boxeador Eléider Álvarez (81 kg), las pesistas Tulia Ángela Medina (69 kg) y Ubaldina Valoyes (75 kg), y la taekwondoca Gladis Alicia Mora (49 kg), son sus esperanzas de triunfo.
La nación cafetera acumula solamente una medalla de oro en toda la historia olímpica, obtenida por la pesista María Isabel Urrutia (75 kg) en Sydney 2000. Sin embargo, en los últimos años han llegado sus resultados más relevantes.
A saber, como anfitriona de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en 2006, Colombia superó a Venezuela por 23 títulos. Luego, en los Panamericanos de Río 2007, obtuvo 14 coronas, una cifra inédita hasta ese momento.
El resto de Latinoamérica tiene poco que aportar, salvo destellos del marchista ecuatoriano Jefferson Pérez y el saltador de longitud panameño Irving Saladino. Eso, claro está, sin mirar hacia las demás islas del Caribe, pues estas presentarán credenciales en el atletismo.
Entre todas sobresale Jamaica, cuya nómina incluye al plusmarquista mundial de los 100 metros planos, Usain Bolt, y el ex recordista de esa prueba, Asafa Powell, entre otros.
En fin, esperemos para ver de dónde son los cantantes. Aunque tengo una corazonada: son de la loma y cantarán en chino.