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Foto: Juan Moreno Fue un regalo de la tecnología, del esfuerzo de la Televisión Cubana, y —mucho antes— del trabajo de los obreros en la Isla de la Juventud, que acondicionaron su estadio municipal para que se juegue allí de noche al béisbol: millones de cubanos vimos este jueves en acción al valiente Carlos Yanes, el único pelotero participante en 25 Series Nacionales.
Los visitantes villaclareños comenzaron a tocar la bola desde la primera entrada, como para burlar los reflejos del veterano; en el segundo inning, una jugada controvertida —batazo de Yorkis La Rosa que golpeó al corredor Ariel Borrero— contribuyó a que cayera el segundo cero.
En el cuarto, los pineros fabricaron una doble jugada. Una entrada después, parpadearon en la mecánica defensiva, pero ante el siguiente bateador realizaron un out providencial en la goma, de Dainiel Gálvez a Vladimir García.
En el sexto, Félix Pérez atrapó una bola de cordón de zapatos, en el jardín izquierdo, y dobló a Pestano, que corría en la inicial.
Una dudosa determinación, en tercera base, le brinda oxígeno a Yanes en el séptimo episodio, poco después de que sus compañeros anotaran dos veces, y de que Borrero disminuyera la diferencia, con jonrón al centro del terreno. Por último, el veterano sale del partido en el octavo, por sobrepasar el límite de 100 envíos, y no tiene decisión en un agotador programa, que sería finalmente sellado.
Oriundo de Cumanayagua, en Cienfuegos, Yanes tiene en su expediente el único juego de cero hit, cero carrera, de un tirador de la Isla de la Juventud, y se lo propinó a Villa Clara. Según Tele Rebelde, su victoria 200 fue igualmente contra un equipo naranja.
Hasta anoche, Yanes sumaba un récord de 214-216 en nuestros clásicos, con 28 lechadas, 39 juegos salvados, y un buen promedio de 4,51 carreras limpias al cabo de casi un cuarto de siglo tirando pelotas.
Como la Isla de la Juventud no va a estar en los play off, tal vez la grabación del juego del 10 de enero en el estadio Cristóbal Labra sea la última constancia gráfica en la carrera de Carlos Yanes, uno de los hombres que han tejido leyendas en nuestro deporte.
