El receptor Yanier Bello fue el primero de los nueve jugadores camagüeyanos que ocupó el noveno turno al bate. Foto: Alex Castro Todo comenzó un sábado, nada menos que el día 13. Se inició en Esmeralda, pero concluyó en la fecha siguiente, en la ciudad de Camagüey: durante el suspense, nueve hombres desfilaron en el mismo turno al bate del equipo agramontino, ante Industriales.
No puede haber otro récord semejante en nuestros campeonatos. Yenier Bello, receptor abridor y noveno bate, fue sustituido en la sexta entrada por el corredor emergente Héctor Hernández; después Alier Noa se puso los arreos.
Dariel Álvarez empuñó en el séptimo, por Noa, y pegó hit, pero fue reemplazado a la defensa por Alexei Tanis. No confió el director, Miguel Borroto, en la ofensiva de Tanis, y envió en el décimo a Yoel Pedroso, que recibió base por bolas.
Pero tampoco el desplazamiento de Pedroso era de fiar, así que Rafael Lastre se convirtió, por decirlo de alguna manera, en corredor de cortesía.
Al regresar los locales al campo de juego, Adalberto Ibarra, que era el segundo en la tanda y bateador designado, se colocó la máscara de hierro.
Como Borroto perdió al designado, entonces Arley Hernández, quinto en la lomita camagüeyana, debía comparecer al cajón de bateo, pero en su lugar lo hizo Yuriandy Nápoles, que se embasó por bola ocupada.
Omar Barrero apareció a seguidas como sexto lanzador a las órdenes de Borroto, mas su equipo se impuso antes de que él debiera batear (Camagüey cuatro, Industriales tres, en 13 innings)... y colorín colorado, nueve peloteros por el noveno turno han desfilado.