Vesselín Tópalov Vladimir Krámnik. Luego de 13 años de polémicas y vaivenes, el ruso Vladímir Krámnik y el búlgaro Vesselín Tópalov disputarán desde mañana el trono unificado del ajedrez mundial.
Tópalov, de 31 años, se proclamó campeón mundial en octubre de 2005 en la ciudad argentina de San Luis, dejando en la cuneta a rivales de alcurnia como Adams, Leko, Polgar, Anand, Morozévich, Svídler y Kasimdzhanov. Mientras, Krámnik, quien tiene la misma edad que su oponente, es considerado el eterno sucesor de Garri Kaspárov (el mejor ajedrecista de las últimas décadas, ya retirado) desde que le derrotó en el año 2000 en el torneo del orbe «oficioso» en Londres. Mas, desde entonces ha sido criticado por su juego clásico, quizá carente de ambición.
Será un match al mejor de 12 partidas, donde el holandés Guert Gijssen, quien dirigió en 1987, en Sevilla, uno de los históricos enfrentamientos entre Garri Kaspárov y Anatoli Kárpov (terminó en tablas, 12-12), será el juez principal.
El sorteo que determinó el color de las piezas para la primera partida (Krámnik abrirá con blancas) tuvo lugar este jueves en Elista, capital de la república rusa de Kalmikia. Allí, Kirsán Ilyumzhínov, presidente de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE), hizo votos por la unidad y rindió homenaje a la «escuela rusa», que ha generado muchos de los mayores maestros de la historia del juego-ciencia. (SE)