Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Bésame mucho

Todavía está fresco el recuerdo de miles de personas desnudas, que hace dos años, posaron en el famoso Zócalo de la ciudad de México para dejarse retratar por el antojadizo Spencer Tunick. El próximo 14 de febrero, Día de San Valentín, miles de parejas acudirán a este mismo lugar para darse un beso simultáneo. Los enamorados tendrán como fondo musical al famoso bolero Bésame mucho, compuesto en 1940 por la mexicana Consuelo Velázquez. La convocatoria aclara que se trata de amor, con cero violencia, y la acompañan resultados de una encuesta que develan que el 50 por ciento de los hombres y mujeres entrevistados son celosos. Ojalá tanto besuqueo no termine como la fiesta del Guatao... Ah, y cualquiera que sea el final, no dejen de invitar a Tunick para que nos regale su foto.

La mexicana Magda Olivia Alvarado, de 37 años, y el alemán Andree Hickethier, de 40 años, aficionados del alpinismo decidieron el pasado jueves realizar el sueño de sus vidas: casarse en la cima del volcán Citlaltépetl, de unos 5 747 metros, el más alto de México. A pesar de su afición por las alturas, la novia confesó que «se estaba rajando», pero decidió continuar porque estaba más cerca de la altura que de la base. Contenta por haber logrado su proeza, aconseja a las parejas que planean casarse «hacer algo que rompa las reglas, una locura». ¿Y si el volcán de pronto hubiese despertado? Qué va, Olivia, déjame aferrado a lo convencional.

Si no sabes lo que hay en tus bragas, ¿debes utilizarlas? Con este mensaje, la marca inglesa Eco-Boudoir, quiso llamar la atención sobre una industria que para fabricar blumers, ajustadores y otras prendas de vestir, provoca nefastas consecuencias ecológicas (emisiones de gas carbónico, consumo de agua y utilización de pesticidas en las cosechas de algodón). La única diferencia de los aditamentos ecológicos que produce con respecto a los tradicionales está en su composición: solamente seda, algodón «bio», fibra de bambú o madera. Ya ven, se puede ser verde, sin renunciar al glamour.