Retrato de Carmen de Artal. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2021 | 12:25 am
Era el 13 de enero de 2021 y el Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba (Mnbac) anunciaba el cierre temporal de sus instalaciones al público. Como parte de la respuesta al empeoramiento de la situación epidemiológica en la Mayor de las Antillas, los establecimientos culturales tuvieron que suspender sus actividades y servicios, al menos de forma presencial.
Las puertas del templo cubano de las artes visuales continúan selladas, pero de alguna forma los amantes de la contemplación siguen entrando en sus salas. JR se acerca a distintas iniciativas que la institución artística ha tomado en los últimos meses para paliar la necesidad de mantener el contacto de sus obras con el público, muy a tono con otras experiencias internacionales.
Alrededor del mundo, durante este año y medio de pandemia, distintas han sido las iniciativas para aprovechar el espacio virtual y llevar algunas exposiciones u obras significativas al alcance de todas las miradas posibles. Claramente, ni la mejor resolución de la fotografía de determinado lienzo puede sustituir el contacto visual directo con la pieza artística: ese relieve de la imagen, esas texturas que la mirada palpa con un certero vistazo, se entremezclan con un aroma característico, capaz de envolver al espectador en una magia que solo resulta posible cuando se está ante la obra de arte.
Desde el Museo del Louvre, con la muestra online de 482 000 obras de arte de su archivo; el Museo del Prado, con sus visitas virtuales a la exposición de las Pasiones mitológicas —la selección reúne por primera vez a las seis Poesías de Tiziano, junto a obras de Rubens y Velázquez, entre muchos otros maestros del arte pictórico—, hasta los recorridos virtuales del Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York, entre muchas otras iniciativas peculiares de otras instituciones artísticas, constituyen ejemplos de la intención por garantizar el disfrute de las artes visuales, en cuyo empeño el Mnbac no se ha quedado atrás.
«Hace meses que el Museo no recibe al público. Aunque hemos incrementado el trabajo en las redes sociales para mantenernos en contacto permanente con los usuarios, ello no sustituye la relación directa. Además, en nuestro caso, la conexión a internet de la cual disponemos, no siempre es la más idónea y en ocasiones nos hemos quedado con deseos de realizar más iniciativas virtuales con propósitos más ambiciosos», comenta Claudia Carmona Borges, especialista en comunicación del Mnbac.
Para lograr estos propósitos el Bellas Artes se ha auxiliado de la plataforma Behart, una «Red Colaborativa para la promoción, comercialización, socialización y estudio de las artes visuales, que busca crear un ecosistema de encuentro entre artistas, galerías, curadores, críticos, coleccionistas y aficionados».
En Behart el Museo ha puesto a disposición del público interesado tres exposiciones que se mantienen con acceso libre, junto a otros contenidos de la plataforma, entre reseñas y trabajos teóricos, así como una relación de artistas visuales cubanos, junto a algunas de sus obras.
Sobre las propuestas del Mnbac figura la muestra Adquisiciones de obras del Museo Nacional de Bellas Artes 2019-2020, una sugerente y abarcadora selección que pudo ser apreciada de forma presencial por el público antes del cierre temporal debido a la pandemia.
La exposición reúne un total de 75 obras adquiridas por el Museo en el período definido.
Adquisiciones…, cuya curaduría estuvo a cargo de Oscar Antuña Benítez, reúne la obra de insignes artistas visuales cubanos, como los fotógrafos Raúl Cañibano Ercilla y Alejandro González Méndez; los dibujantes Arístides Hernández Guerrero (Ares) y Jesús González de Armas, así como los premios nacionales de artes plásticas Eduardo Ponjuán González (2013) y Lázaro Saavedra (2016), entre muchos otros.
La misión del Museo es asegurar el estado de conservación de las piezas y mantenerlo todo listo para la próxima reapertura.
Las Adquisiciones… brillan con la luz que irradia la pléyade de artistas cubanos que se dan cita en esa sala virtual, cuyo recorrido nos deja con ganas de seguir el tránsito hacia otros espacios que la institución propone, como Paletas pintadas. Pintura española del Museo de La Habana (1909-1916).
Se trata de una selección de 33 ejemplares de paletas pintadas, de 31 autores. El interés de las piezas reside en su origen, su calidad plástica y el repertorio o que forman sus autores, entre los cuales sobresalen destacadas figuras del período, nacidas entre 1841 y 1893, como Joaquín Sorolla Bastida o Ricardo de Madrazo Garreta, entre otros.
Se cierra el ciclo expositivo del Bellas Artes con la más reciente muestra virtual, Fernando de Szyszlo o el último de los renacentistas peruanos, bajo la curaduría de Margarita González Lorente y Roberto Cobas Amate, quienes rinden tributo al «principal exponente de la plástica de la segunda mitad del siglo XX en el Perú».
La selección recoge parte de la obra de uno de los más reconocidos pintores peruanos, fallecido en 2017 a los 92 años. En su obra, referencia la curadora, «hay historia, sociedad, legado de los antepasados, raíces de América Latina, estudio y vida».
Con este homenaje a Fernando de Szyszlo no terminan las actividades del Bellas Artes y es que al decir de Claudia Carmona Borges, especialista de comunicación, «no solo hemos trabajado en la plataforma Behart. En sentido general hemos utilizado más las redes sociales para ganar visibilidad entre los públicos consumidores de esos espacios. Para ello hemos compartido interrogantes y curiosidades sobre las artes visuales, junto a imágenes de piezas artísticas, y cada semana dedicamos las publicaciones a una colección o artista representativo de nuestra institución.
«Además el Museo ha aprovechado estos meses para enfocarse en los procesos de restauración de obras y remozamiento de las instalaciones. El departamento educativo también ha continuado con sus talleres de creación dedicados al público más joven, ahora desde internet», comenta la comunicadora.
Se trata del taller de creación infanto-juvenil El Carnaval, fiesta para los corazones y la esperanza, una temática que tiene presencia destacada en la obra de muchos artistas que integran las colecciones de la institución. Los interesados en participar pueden obtener información en la dirección educacionlinemnba@gmail.com.
Más allá de nuestras fronteras, muchos museos han reabierto sus puertas, pues la situación epidemiológica de sus respectivos países así lo permite. Pero lamentablemente ese no es un escenario que acompañe a los museos cubanos, por ahora.
Aún debemos aguardar, con paciencia, el día en que reabran las puertas del Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba para disfrutar sentados frente a Relación, de Tomás Sánchez, contemplar La silla, de Wifredo Lam, o deleitarnos con las atractivas colecciones de arte universal. Mientras llega el ansiado momento, saciemos el deseo de la contemplación en el mundo virtual con un museo siempre abierto.