Editorial Gente Nueva Autor: Juventud Rebelde Publicado: 16/01/2019 | 08:40 pm
SANTIAGO DE CUBA.— La ciudad rebelde de Cuba cedió en su terquedad, conquistada por el ardor de la letra impresa, la pasión por el conocimiento, la magia de la escritura. Desde este miércoles y sin ofrecer resistencia alguna, Santiago de Cuba ha sido tomada por los libros.
Más de 345 000 ejemplares de textos, entre ellos unos 300 nuevos títulos; la muestra del quehacer de editoriales locales y nacionales, el siempre apasionante reencuentro entre los autores y su público lector signan el capítulo final de la 28va. edición de la Feria Internacional del Libro, que se extenderá hasta el próximo domingo.
Calificada desde el mismo acto inaugural por el profesor de la Universidad de Oriente, Luis Alberto Pérez Llody, como «un monumento de luz, una llama ardiente, revolucionaria y popular, genuinamente de todos», la versión santiaguera de la Feria del Libro se abrió, desde las áreas del complejo cultural Heredia, al ir y venir de lectores de todas las edades, las presentaciones de libros, los paneles, intercambios, el reconocimiento a autores e instituciones y la actuación de proyectos artísticos en espacios como el pabellón Tesoro de Papel.
El evento cultural de mayor convocatoria en el país es también lugar para agasajar y reconocer; por eso en esta fiesta de las letras además de congratular Eduardo Heras León, Premio Nacional de Literatura 2014, a quien se dedica la cita, se homenajeó a la Brigada de Instructores de Arte José Martí, que este año llega a sus primeros 15 octubres fieles al empeño de enseñar a las nuevas generaciones a hacer y apreciar el arte, y a la Doctora Olga Portuondo Zuñiga, historiadora de la ciudad heroica, por su cumpleaños 75.
Entre los momentos más esperados del evento estuvo, la presentación este 11 de abril, del volumen Emilio Bacardí Moreau. De apasionado humanismo cubano, primera biografía del ilustre literato, patriota y promotor cultural, fruto de cuatro años de investigación por parte de la Doctora Olga Portuondo y una entrega de la editorial Oriente. Con esta obra, según su autora, la historiografía cubana salda una deuda con la prominente figura.
Y precisamente la historia ocupó un lugar preponderante dentro de las acciones de la Feria en la ciudad. Paneles sobre la figura de Juan Almeida Bosques y el año 1959 como punto de giro en la historia de Cuba y la presentación de unos siete volúmenes de este tema, en la sala Leonardo Griñán Peralta, trascendieron como una valiosa opción que agradecen los amantes del conocimiento sobre nuestro pasado glorioso.
Asimismo, y como un momento especial de la primera jornada se reconoció a la Casa de las Américas por sus 60 años. Tras la exposición detallada de la huella fecunda de la institución que atesora un fondo bibliográfico de más de 120 000 títulos de literatura latinoamericana y caribeña, Camila Valdés León, directora del Centro de Estudios del Caribe, de la «Casa», donó a la biblioteca provincial santiaguera, Elvira Cape, la colección completa del Premio Casa de las Américas 2018, además de un volumen sobre los primeros 50 años de historia de ese centro.
Amplio programa de actividades
En el programa de la Feria, sobresalen el tradicional encuentro de pequeños escritores, un taller de origami para niños y adolescentes, la presentación de productos y servicios informáticos de empresas del territorio que ilustran sobre las tendencias y oportunidades del libro digital, y los intercambios entre jóvenes escritores vinculados a la plataforma promocional de la Asociación Hermanos Saíz y sus editoriales.
Durante cinco días Santiago ha sido tomada por la buena literatura y eso se siente más allá del propio escenario del Heredia. En la calle Enramadas la recién rehabilitada librería Amado Ramón Sánchez extiende su horario hasta las nueve de la noche y de la mano de espacios como Los libros andan el influjo de la letra impresa llega hasta preuniversitarios, universidades, centros de labor, repartos y comunidades.
Así escribe Santiago, y sobre todo lee, su capítulo, el capítulo final de esta 28va. Feria Internacional del Libro, que después de un periplo de luz por toda la Isla tendrá su cierre nacional en la tarde del domingo 14, en el Salón de los Vitrales de la Plaza de la Revolución Antonio Maceo. Hasta allí llegará también el recuento de estos días en que la ciudad rebelde de Cuba cedió en su terquedad, conquistada por el ardor de la letra impresa, la pasión por el conocimiento, la magia de la escritura.