Las Romerías de Mayo confirman cuánto puede lograr la AHS con la entusiasta participación de sus integrantes. Foto: Kaloian Con la presencia de la primera secretaria del Comité Provincial del Partido, Teresa Amarelle Boue, los creadores e intelectuales jóvenes miembros de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en Las Tunas, se reunieron en la mañana de este lunes para debatir en torno a los principales retos y desafíos de esa organización en su asamblea de balance, donde fue ratificado el artista de la plástica Rodney González Ávila como presidente en el territorio.
El encuentro devino importante foro de discusión, donde se reflexionó ampliamente sobre la misión de la AHS de dar a conocer el arte joven no solo en las principales ciudades, sino también en las comunidades y los barrios. «No podemos olvidar que a nosotros nos corresponde llevar el peso fundamental de la cultura joven en la provincia, aseveró Iraida William, electa vicepresidenta de la organización. El camino tiene que ser que todos nuestros proyectos sean reconocidos por su calidad, como sucede con Vocal Melisma, Teatro Tuyo, la compañía Emovere, el grupo de rock Prótesys... Hasta que la AHS no se convierta en la principal protagonista de los espacios que prefiere la juventud, no podemos sentirnos satisfechos».
Miguel López se preguntó: «¿Dónde está el trabajo comunitario sistemático de la Asociación? ¿Cuándo vamos a la comunidad? ¿Por qué tenemos que esperar a que azote un ciclón para ir a Jesús Menéndez o a Colombia?». El promotor explicó los resultados del proyecto Confluencias (dibujos de paisajes), que desarrolla junto a un grupo de creadores en Majibacoa, el cual es referencia en el trabajo cultural comunitario de la provincia.
El director del colectivo Teatro Tuyo, Ernesto Parra, llamó a velar por la extensión y caracterización de los espacios para la programación cultural. «Es muy estimulante constatar que con más frecuencia se rehabilitan sitios para el esparcimiento de la población, pero tenemos el deber de lograr que cada acción que hagamos esté marcada por la calidad».
Frank Castell, escritor puertopadrense, considera que «hay que abrir el campo visual, mirar a la periferia, a los creadores que están haciendo una obra honesta, “con las vísceras”. Quienes radicamos en otros municipios no contamos a veces con una promoción adecuada; las instituciones deben acercarse más a nosotros. Es lamentable que estemos haciendo una obra comprometida y que esta no se reconozca todo lo que debiera».
En nombre de los promotores culturales intervino Petia Cuba, quien reclamó una superación más constante. «Es hora de organizar talleres y cursos que permitan a los especialistas promover y proteger con eficiencia el arte de vanguardia».
La directora del Coro Euterpe, Aleivis Araújo, invitó a pensar en «qué vamos a hacer los artistas e intelectuales jóvenes para asegurar el futuro de las nuevas generaciones, que es el de nuestra nación. ¿En verdad tenemos conciencia de lo que les puede aportar a los niños y jóvenes participar en una cantoría, en un festival de ruedas de casino, en un concurso de dibujo...? Sin la cultura no vamos a llegar a ninguna parte. Si bien es cierto que existen problemas económicos mundiales, de los cuales no están exentos Cuba y Las Tunas, aquí no faltan ni el talento ni la vocación de participación».
En las palabras finales del cónclave, la primera secretaria del Comité Provincial del Partido en Las Tunas aseguró: «Hoy la AHS en ese territorio está más consolidada, fuerte y comprometida. Sentimos mucho respeto por lo que hacen». La máxima autoridad del PCC en la provincia convidó a ir más al barrio,
«... a estar más cerca de la gente. Desde la cultura se pueden fomentar valores. Que nadie tenga duda: nuestros jóvenes artistas están encontrados con su tiempo».
Mover ideas desde el compromisoCon la mayor membresía fuera de la capital, la filial holguinera de la AHS ha sido reconocida por más de dos décadas por la realización de importantes proyectos, eventos y espacios de programación, entre los que sobresalen la editorial La Luz, el Festival de Rock Metal HG o las reconocidas y concurridas Romerías de Mayo, que en unos días celebrarán su decimosexta edición.
Con esa experiencia de trabajo, los miembros de la AHS en el territorio discutieron el pasado sábado sobre la necesidad de perfeccionar su funcionamiento, en una circunstancia en que muchos reclaman un mayor activismo de su dirección y una mejor integración de los artistas que la componen.
El estudiante de Periodismo Daniel Alejandro Benítez instó a la nueva dirección, encabezada por el investigador Esneider Gutiérrez, a rescatar el liderazgo y el protagonismo de la Asociación en el panorama cultural de la provincia que, en su criterio, se ha reducido considerablemente. «Apenas existimos como organización y la desidia se apoderó de algunos de nosotros. Todo cambiará cuando en verdad participemos por convicción y no porque se nos convoque; cuando comprendamos cabalmente el poder que tiene el arte para transformar la vida».
Jorge Ribail, realizador audiovisual, está convencido de que no es correcta la justificación de que «no hacemos nada porque no poseemos sedes. Lo que más necesitamos no es la casa de ladrillos, sino una casa de personas, la familia, la casa de los corazones».
El trovador Alito Abad insistió en que la calidad debe dominar cada acción que protagonice la AHS, desde el momento mismo en que se plantea la posibilidad de que alguien ingrese a ella. «Hay que ser más rigurosos con la selección de la vanguardia artística, que en Cuba es también vanguardia revolucionaria. Eso nos define y diferencia».
A reflexionar sobre un problema esencial, la crisis económica y financiera que también nos afecta, convidó Jorge Luis Sánchez Grass, destacado realizador y promotor de la cultura holguinera. «Se hace urgente saber identificar y colocar en un lugar privilegiado, dentro de la participación, a la verdadera vanguardia artística; poner nuestros recursos en los proyectos más sólidos y de más calidad. Esa crisis no puede llevarnos a una de pensamiento. No se necesitan recursos para debatir, para mover ideas».
Esneider Gutiérrez se refirió al compromiso que ha caracterizado a la organización y recordó que «para que hayamos podido tener esta Cuba de hoy, tuvieron que derramar su sangre los jóvenes que un día se convirtieron en la vanguardia de la juventud cubana. Nos toca ser consecuentes con ellos, con la historia, la cultura y la identidad cubanas. Me resisto a creer que no podemos hacer nuestra historia: contagiar con nuestra obra en las escuelas de arte, en las comunidades; evitar que la mala cultura se imponga. La Patria se estremece de dolor cuando un intelectual, un artista, se detiene. Es nuestro deber y nuestra obligación retribuir con nuestra creación ese esfuerzo».
La Asamblea concluyó con el reconocimiento de María del Carmen Díaz Cruz, en nombre del Buró Provincial del Partido, por la hondura del debate. «Es una necesidad tener conciencia de lo que significa pertenecer a un grupo de la vanguardia. Eso entraña una responsabilidad ante la vida, una responsabilidad social enorme; actuar con honestidad y a favor del mejoramiento humano; eso significa estar comprometido con su tiempo. Eso quiere decir trabajar por un futuro mejor. Esa condición nos ofrece la posibilidad de estar al lado de los que aman y fundan, de los útiles y virtuosos; de estar al lado de la Revolución».