En 40 años de trabajo, la Unidad Central de Cooperación Médica (UCCM) ha preparado a 33 000 profesionales integrantes de la Misión Barrio Adentro en Venezuela, las tres brigadas que combatieron el Ébola en África Occidental, los 11 000 galenos del Programa Más Médicos para Brasil, las 90 brigadas del Contingente internacional Henry Reeve y las 58 contra la Covid-19, destacó Michel Cabrera Laza, director de la institución.
Según declaró a la prensa, la entidad cumple con el encargo del Ministerio de Salud Pública y el Gobierno Cubano de dar cumplimiento a cada uno de los compromisos internacionales contraídos, y la gestión del capital humano especializado con elevadas competencias profesionales, desarrollo científico-técnico, altos valores humanos y principios éticos, desde su fundación el 3 de octubre de 1984 por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
Comprometidos con la Patria Socialista, resaltó, los 700 trabajadores de la UCCM contribuyen al cumplimiento de las misiones de asistencia técnica, docente y de cooperación médica internacional.
Afirmó que resulta la razón de ser de la institución, por ende, el compromiso de elevar la eficiencia y la calidad en cada uno de los procesos en los departamentos de colaboración, en las direcciones provinciales de salud, que van desde la selección, preparación, llegada del cooperante a la brigada, la profesionalidad en la prestación del servicio, el respeto a los protocolos médicos y costumbres de los nacionales, así como su regreso a la Patria con el deber cumplido.
Cabrera Laza expresó que los resultados son irrefutables, el reconocimiento a la cooperación médica internacional en más de 160 países, la propuesta al Premio Nobel de la Paz a las brigadas del Contingente internacional Henry Reeve que combatieron el Ébola en África y el otorgamiento del Premio de los Pueblos a los cooperantes en la lucha contra la Covid-19.
La profesionalidad, la experiencia y el humanismo del Ejército de Batas Blancas ha llegado a países desarrollados como China, Italia, Qatar, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, entre otros; derrumbando barreras idiomáticas y enfrentado bajas temperaturas, como verdaderos embajadores de Cuba por el mundo, concluyó.