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La voz de quienes han rejuvenecido el Parlamento

No son pocos los desafíos que tiene la Asamblea Nacional del Poder Popular constituida este miércoles. En ella, los más nuevos  son casi el 20 por ciento de los 470 diputados, y han de aportar todo su espíritu y sentimientos para cumplir con el mandato del pueblo

 

Autor:

Raciel Guanche Ledesma

Emociones, responsabilidad y compromiso permanente. Eso sintieron en carne propia los que  este miércoles se sentaron por vez primera en el salón plenario del Palacio de las Convenciones, justo cuando se constituía la Asamblea Nacional del Poder Popular, en su 10ma. Legislatura. Los rostros muy jóvenes mostraban también  las sonrisas e impulsos que en lo adelante deberán mantener quienes recién se estrenan como diputados.

Luego de la elección del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, durante su discurso ante los diputados y diputadas, aseguraba que «complace mucho ver cuánto se ha rejuvenecido nuestro Parlamento, cuando una de las mayores preocupaciones de los últimos meses y años es el envejecimiento poblacional y la alta emigración que involucra a los segmentos más jóvenes de nuestra sociedad».

Entonces, agradeció a las nuevas generaciones por el estímulo y protagonismo permanente en las batallas más duras de la Revolución. A su vez, el Jefe de Estado planteó para los jóvenes legisladores no pocos retos en la Cuba actual, pues toca estimular, según dijo, que el espíritu juvenil se exprese en todas las labores desde el barrio. Hay que convencer y probarle a los demás que sí podrán realizarse en su Patria.

Es importante que el espíritu juvenil se exprese en todas las labores desde el barrio. Foto: Roberto Suárez

De ello está consciente el santiaguero Carlos Antonio Leiva Isaac, quien a sus 23 años ocupa el cargo de presidente de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) en la Universidad de Oriente y ahora es diputado al Parlamento. Al respecto, aclaró que lo que sea capaz de construirse en este período de cinco años debe pensarse con lógica también desde los jóvenes.

Vivimos en un contexto complejo, no somos entes ajenos a esa situación, recordó. Por ello pueblo reclama de nosotros mayores atenciones, más enfrentamiento al delito y la corrupción en tiempos que a veces tienden a ser inciertos. Y ahí está el reto principal de la 10ma. Legislatura que inicia ahora, significó.

No solo se espera de las nuevas generaciones un aporte en materia de acompañamiento, sino además de acción y proposición permanente. Sumarnos a los análisis económicos, comentó Carlos Antonio, al proceso de construcción colectiva apoyándonos en las ideas salidas de nuestras
universidades y al trabajo en los barrios, resultan elementos imprescindibles.

¿Cómo lograrlo de la mejor manera? Esta es una pregunta que todos los días debemos hacérnosla como representantes de nuestra gente en el legislativo, dijo. Pero estar con el pueblo demanda sensibilidad e iniciativa, demanda predicar con el ejemplo siempre, agregó.

Carlos Antonio tuvo la oportunidad durante la sesión constitutiva de hablar en el plenario y cuenta que no pudo evitar las emociones. Con alma de poeta, este joven reconoce la significación de estar sentado en un escaño representando al pueblo. «Aquí se aprende mucho y se demuestra que la participación social no queda anclada solo a conceptos», enfatizó.

Historia y responsabilidad

De igual forma opina Lázaro Alejandro Romero Álvarez, diputado por el municipio de Cienfuegos y delegado de circunscripción en esa provincia. Él nunca tuvo la aspiración ni se imaginó que estaría algún día sentado entre tanta historia y responsabilidad.

Sin embargo, con 23 años Lazarito, como le llaman cariñosamente en su tierra, siente aún más en estos momentos el compromiso mayor con sus vecinos y el pueblo en general. Porque ahora toca, según explica, abogar, proponer y también dar respuestas concretas a quienes en genuino ejercicio democrático nos eligieron.

Lázaro Alejandro Romero Álvarez asegura que siente un compromiso inmenso con el pueblo. Foto: ANPP

Para este maestro primario, si algo demostraron los intercambios de los diputados con el pueblo, es que se demanda mucho más intercambio con la población. Y que ellos sientan que están siendo escuchados receptivamente, porque al menos se va a intentar solucionar sus problemas.

Tampoco es ir un día al barrio y luego no regresar. Eso no funciona ni debe ser premisa para ningún revolucionario, habló. Las batallas se ganan en unidad y los diputados cubanos no somos parte de una élite, venimos de la base y seguimos viviendo en las bases populares, recordó.

Esta 10ma. Legislatura, reconoció tiene varios desafíos. En primer lugar, como se ha dicho, desde el punto de vista social, al apostar por el desarrollo económico de la Isla, pero, además, con la continuación del estudio y aprobación de leyes importantes para la vida del país.

Roberto Alejandro Carrazana Carballo, diputado por el municipio de Florida y presidente de la FEU en la Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey, apuntó que de cara al futuro este constituye un Parlamento renovado, con un promedio de edad de 47 años, que debe plantearse como métodos para avanzar la autocrítica y la no complacencia con lo alcanzado hasta el momento.

Otro de los retos de la Asamblea y de los jóvenes diputados en particular, dijo Carrazana Carballo, está enfocado en llevar a cabo todo el proceso de consulta popular de la política integral dedicada a nuestra niñez, adolescencia y juventudes, la cual debe aprobarse en la presente legislatura.

Tenemos que fortalecer nuestro proyecto de justicia social, dijo  Roberto Alejandro Carrazana Carballo. Foto: ANPP

Como parte de una generación que convive aún en nuestras universidades, las cuales son parte de la comunidad, tenemos la obligación de combatir, por ejemplo, los precios abusivos, la desidia de no pocos y la ineficiencia de algunos indolentes, significó.

Esas son premisas, resaltó quien nació en medio de este proyecto humano, perfectible y justo, se siente orgulloso de la tierra que tanto resiste. En lo adelante, en las manos de las nuevas generaciones de diputados y del pueblo cubano en general, descansa toda la obra hecha y la que aún queda por escribir.

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