Lázaro Guerra Hernández, director técnico de la Unión Eléctrica (UNE), informó en la Mesa Redonda que tras el paso de Ian por el país hubo daños en la infraestructura de las provincias occidentales. «El día 27 ocurrió un evento de cero total, con la apertura de las líneas que unen la zona occidental con la oriental. Este disparo creó un desbalance entre la zona deficitaria de generación y la superavitaria».
Según reporte de Cubadebate, Guerra Hernández recordó que ese tipo de evento ya había ocurrido anteriormente con el huracán Irma. «Esto afecta a todo el país».
El especialista agregó que inmediatamente se inició la restauración del sistema tras la conformación de microsistemas a partir de la generación distribuida. El primer objetivo es energizar las grandes termoeléctricas para arrancarlas, y luego servir carga. A la vez, se pretende darles energía a estos propios microsistemas hasta poder lograr la interconexión.
«En la región oriental se ha llegado con energía a la termoeléctrica de Felton que en estos momentos está entregando 67 MW y también se pudo llegar con energía a la unidad 6 de Nuevitas para incrementar la carga a servir para ampliar».
En el caso de la zona central, Guerra Hernández dijo que se tiene la posibilidad de llegar a la Guiteras que ya está en proceso de arranque; mientras que la Central Termoeléctrica de Cienfuegos realiza esta misma operación.
La zona occidental se energiza con la móvil a la termoeléctrica del Mariel y la de Santa Cruz del Norte.
Advirtió que el sistema es aún muy débil y que existe muy poca capacidad de generación. Solo generaban en ese momento la central flotante de Regla, Energás y Felton.
Sobre las afectaciones provocadas por el huracán, refirió que estas se concentran en el occidente, sobre todo en el circuito de 220 000 voltios entre Pinar del Río y Artemisa. En la distribución primaria son 117 afectaciones en la 33 000 voltios y otros 116 en el resto del sistema primario.