Sostienen nuevo encuentro con gobernadoras y gobernadores. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 21/07/2022 | 12:51 am
Que nuestros niños crezcan felices, que se respete el derecho de todas las familias, que un problema pueda resolverse con la participación de todos, en la solidaridad, ahí debe radicar nuestro bienestar, aseguró este miércoles el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al intervenir en la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Las reflexiones del Jefe de Estado llegaron luego de que Meisi Bolaños Weiss, ministra de Finanzas y Precios, presentara su informe de la liquidación del presupuesto del Estado en 2021, el año más duro de la pandemia en el país, y en el que hubo que administrar de manera más efectiva los recursos financieros. Todo ello en medio del odio del Gobierno norteamericano y su recrudecido bloqueo.
Por eso, alertó Díaz-Canel que nuestro concepto de bienestar no puede estar en el consumismo, sino en las relaciones humanas como sociedad. «Nos ha tocado vivir una etapa de una complejidad tremenda, pero de todos los problemas vamos a ir saliendo. Y lo haremos construyendo el socialismo y la Revolución».
Según reporte del sitio web Cubadebate, en otro momento de su intervención, el mandatario aludió a tres elementos que caracterizan la lógica imperialista de Estados Unidos contra Cuba: hegemonía, estrategia de subversión y asfixia económica, lo cual —dijo— es lo más complicado de enfrentar. El mecanismo es aplicar una política criminal y genocida para provocar un estallido social y con ello derrocar a la Revolución cubana, denunció.
«Hay quienes dicen que el bloqueo es un pretexto de nuestro Gobierno», sin embargo, ¿por qué la Administración estadounidense mantiene y recrudece esa política absurda? «La única explicación es que le temen a una construcción socialista sin bloqueo en Cuba», sostuvo el Jefe de Estado.
Igualmente, señaló que la asfixia económica ha provocado desabastecimiento de alimentos y medicamentos, así como la imposibilidad de acceder a recursos financieros para la compra de materias primas necesarias en producciones nacionales fundamentales.
Refiriéndose a dificultades cuyas soluciones dependen de nosotros, Díaz-Canel llamó la atención sobre la existencia de ineficiencias empresariales que después son respaldadas por el presupuesto del Estado, lo cual afecta el gasto social.
También planteó la necesidad de lograr un sistema productivo local robusto, que permita fortalecer la estrategia de desarrollo local en cada territorio. «Al país no lo vamos a desarrollar si queremos aplicar las mismas cosas en todos los lugares, porque cada territorio tiene particularidades que deben ser tenidas en cuenta».
A juicio del mandatario, es imprescindible reducir el aparato administrativo y burocrático, y que las empresas se subordinen y aporten sus mayores contribuciones a los municipios donde estén enclavadas.
Sobre los precios, uno de los temas tratados por los diputados en el debate, Díaz-Canel criticó que empresas estatales y negocios privados fijen precios sin tener en cuenta las fichas de costo y obtengan utilidades muy superiores a los gastos.
«Hay que actuar más en la base. Tenemos que lograr que desde el Ministerio de Finanzas y Precios, pasando por sus direcciones provinciales hasta las municipales, se controle el presupuesto, pero también el precio, lo cual se puede hacer con control popular», subrayó.
Además, el Presidente cubano afirmó que el imperialismo promueve una plataforma de colonización cultural, buscando que los pueblos vean obsoletas sus raíces, cultura e historias, y «cuando esto ocurre comienzan a asumir los paradigmas que les quieren imponer».
La estrategia de subversión es otro elemento de la lógica imperial. «Es inmoral que una parte de los impuestos que paga el pueblo norteamericano se utilice para financiar la contrarrevolución, las campañas y planes de agresión contra Cuba», aseveró y dijo que el modus operandi en esa avalancha de mentiras y manipulaciones «es coger todos los hechos que pueden ser cotidianos en cualquier lugar, dramatizarlos, sacar lo más perverso y culpar a las instituciones».
¿Cuál debe ser la respuesta del país ante esa lógica imperial? Cuba debe responder —subrayó el Jefe de Estado—con la mayor justicia social posible, con mayor democracia y participación popular y más solidaridad. En el caso de la estrategia de subversión ideológica, expresó que para enfrentarla es imprescindible una mayor articulación revolucionaria.
Ante los diputados de la Comisión de Asuntos Económicos, Díaz-Canel dijo que la Asamblea Nacional se tiene que parecer cada vez más a Cuba y sus problemas, porque así podremos encontrar soluciones y construir consensos. Si el pueblo cubano ha podido resistir la recrudecida agresión imperial es porque es fiel a sus raíces, señaló.