Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Un Código de las Familias extraordinariamente revolucionario

Inclusiva y protectora de las diferencias es la norma jurídica que será sometida a consulta popular desde el próximo mes de febrero

 

Autores:

Margarita Barrios
Ana María Domínguez Cruz
Yuniel Labacena Romero
Monica Lezcano Lavandera

LA Asamblea Nacional del Poder Popular aprobó este martes —por unanimidad— el Proyecto de Código de las Familias, así como someter esa norma jurídica a consulta popular, desde el 1ro. de febrero al 30 de abril del próximo año, luego de una emotiva y profunda jornada de discusión como parte de la primera jornada del  8vo. Período de Sesiones.

Con anterioridad, Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional y del Consejo de Estado, recordó que la Constitución de la República, en su Disposición Transitoria Decimoprimera, establece que el proyecto de código debía ser presentado ante el ente legislativo para la aprobación correspondiente.

En su presentación, Oscar Silvera Martínez, ministro de Justicia, significó el ejercicio de participación popular y democracia socialista que se ha desarrollado desde 2019, cuando comenzó el proceso de debate para que todos aportaran criterios en la concepción del nuevo código.

«Es este un proyecto que no fabrica ni impone modelos, sino que articula una diversidad como expresión de pluralidad familiar y coloca a Cuba en una posición que protege las diferencias. Es un proyecto de sumas y multiplicaciones, de alternativas y oportunidades, y ante todo, es una conquista democrática para quienes no poseían determinados derechos y para los que sí los tenían, que ahora les son reforzados», apuntó.

Silvera Martínez se refirió a este proyecto como «una ley moderna, respetuosa, inclusiva y protectora de toda la familia, porque toma en cuenta todas las expresiones de la diversidad familiar en coherencia con la Constitución, basada en los principios de igualdad y dignidad humana».

La futura norma optimiza principios y consagra valores, fortalece la responsabilidad familiar en lo concerniente a la atención a sus miembros, actualiza y perfecciona las instituciones jurídico-familiares y además potencia la igualdad de género, subrayó.

Igualmente, ponderó entre las ventajas de esta legislación, la ampliación de las variantes del régimen económico del matrimonio para lograr la autonomía de los cónyuges, la garantía de la salvaguarda del interés superior de niños, niñas y adolescentes y la protección a la juventud, a los adultos mayores, a las personas con discapacidad y a la maternidad y la paternidad responsables.

«Es un proyecto que reconoce los derechos de cada miembro de la familia, que potencia la autodeterminación, las preferencias, la igualdad de oportunidades de adultos mayores y personas con discapacidad y, fundamentalmente, amplía el derecho de la comunicación familiar», señaló.

El Ministro de Justicia enfatizó en el derecho de los cubanos a una vida familiar sin violencia, refrendado en esta normativa. «Es prioridad proponer fórmulas garantistas para personas en situación de desventaja y brindar soluciones a los conflictos trasnacionales que puedan surgir».

Hermoso y profundo

Al intervenir en el plenario, Yolanda Ferrer, diputada por Pinar del Río, ratificó su apoyo a este proyecto, que resume las ideas de Fidel, Raúl, Vilma y Celia. Abundó en los preceptos de quien fuera fundadora de la Federación de Mujeres Cubanas y aseveró que «el Código de las Familias que será sometido a consulta popular es, sobre todo, un homenaje a Vilma Espín».

Ofelia Miriam Ortega, invitada a esta sesión del Parlamento e integrante de la comisión redactora, destacó el amor y la justicia presentes en la nueva norma. Catalogó de esenciales los cambios realizados en el código que se quiere y exhortó a enfatizar durante la consulta popular en los valores que promueve su aprendizaje y aplicación.

«La base del amor, los afectos, la consideración, la solidaridad y el respeto mutuo son fundamentales en la familia cubana, lo vi reflejado en los primeros artículos y deseo que aprendamos a vivir con esos valores. Este código es una plataforma avanzada con el marco jurídico adecuado y estoy segura de que nos ayudará a caminar hacia el futuro en la construcción de nuestra sociedad».

El diputado Enrique Alemán, director del proyecto Quisicuaba, instó a continuar perfeccionando la bendecida democracia que tiene este país. «Tenemos un pueblo de fe lo suficientemente inteligente para desechar lo estéril, lo que no aporta en la construcción de nuestra sociedad.  Aprobemos este código, renovador y profundamente emancipador».

El diputado Enrique Alemán, director del proyecto Quisicuaba, instó a continuar perfeccionando la bendecida democracia que tiene este país. Aprobemos este código, renovador y profundamente emancipador.

Por su parte, Arelys Santana, diputada por el municipio capitalino de Habana del Este, habló en nombre de la Comisión de Atención a la Niñez, la Juventud y la Igualdad de Derechos de la Mujer y lo calificó de hermoso y profundo. «La comisión acompañará el proceso de consulta para, desde todos los escenarios posibles, informar y aclarar dudas a nuestro pueblo con el fin de lograr una sociedad más justa».

Mariela Castro Espín, diputada por La Habana, recordó que el respeto a la dignidad plena es uno de los principios fundacionales de la Revolución Cubana. «Un trabajo riguroso y sostenido de diálogo se exige para comprender cuan revolucionario y necesario es este proyecto, expresión de un gradual proceso de la madurez alcanzada por nuestra sociedad en pos de la justicia social.

«Se garantizan derechos de grupos de personas, cuyas realidades no habían sido tan comprendidas. Se les brinda derechos a otros grupos poblacionales. Se promueve más justicia, más equidad y se refuerza la esencia del socialismo cubano cuando coloca a las personas y las familias en el centro de toda reforma.

«La sociedad cubana es una sociedad compleja, diversa y plural y el código refleja la esencia de nuestra Revolución: Cambiar lo que debe ser cambiado… No es cambiar por moda, sino cambiar lo que genera violencia, opresión, dolor, lo que nos aparta de la máxima martiana “con todos y para el bien de todos”.

«Este es un código que no quita derechos a nadie, sino que amplía derechos, no condena ni impone modelos familiares, sino que garantiza el mandato constitucional y por ello, hago un llamado al pueblo a defender este código con argumentos sólidos y con la participación consciente.

«Se sitúa a Cuba en la vanguardia mundial con esta normativa y tenemos el deber y la responsabilidad histórica de aprobarlo para consulta popular, teniendo así la certeza de que le garantizamos todos los derechos a todas las personas, todos los derechos para todas las familias», señaló.

El diputado Miguel Barnet, presidente de honor de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, elogió la muestra madura y democrática de la Asamblea Nacional de llevar este código a referendo. «Es esa la evidencia más contundente del valor democrático de nuestra sociedad. Rompamos barreras y superemos prejuicios. Recordemos a José Martí: “Solo el amor hace milagros, solo el amor nos salva”», dijo.

El diputado Miguel Barnet elogió la muestra madura y democrática de la Asamblea Nacional de llevar este código a referendo. 

Mientras, Reina de la Caridad Torres, diputada por Ciego de Ávila, expresó que es un código que emociona, que conmueve, que demuestra la responsabilidad de quienes lo pensaron y lo defienden. «Yo creo en el Sí que le daremos, porque es el código de  nuestras familias».

El diputado Alberto González planteó su inquietud con respecto a la guarda y cuidado de los menores, reflejada en el artículo 149, pues considera que siempre debe estar ligada a la madre. El Ministro de Justicia aclaró que el código propone posibles variantes y que en todo caso, los menores deben quedarse con quien tengan la relación parental. «No se beneficia una solución por encima de otra porque cada familia es diferente».

Hacia el final del debate, el diputado José Castañeda abogó por argumentar profundamente la nueva norma durante la consulta popular, para lograr su perfeccionamiento, sin que campañas mediáticas enemigas tergiversen su esencia. Mientras el diputado Juan Carlos Rodríguez catalogó este código como extraordinariamente revolucionario y compartió su convencimiento de que el pueblo cubano sabrá comprenderlo y aceptarlo.

 

La diputada Reina de la Caridad Torres expresó ante el plenario: Yo creo en el Sí que le daremos porque es el código de nuestras familias.

 

Fotos: Abel Rojas Barallobre

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.