SANCTI SPÍRITUS.— Un colectivo de 38 jóvenes espirituanos constituyen el más reciente contingente Jóvenes por la vida que se suma a las labores para controlar la COVID-19.
«Específicamente se han insertado en los centros de aislamiento e instituciones de salud donde son alojados los posibles infectados», dijo a Juventud Rebelde Yadira Díaz Chinea, primera secretaria de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), en Sancti Spíritus.
Este grupo, integrado por estudiantes y trabajadores, se suma al centenar de jóvenes de la provincia que ya dan su aporte en la compleja situación epidemiológica.
Antes de ser trasladados a las diferentes instituciones, Osbel Lorenzo Rodríguez, miembro del Buró Provincial del Partido Comunista de Cuba (PCC), los llamó a redoblar el cumplimiento de las medidas higiénico-sanitarias.
«Deben cuidarse con mucha responsabilidad. Hoy es esa nuestra palabra de orden para disminuir la curva de contagiados», acotó.
El bisoño colectivo permanecerá en las instalaciones por 14 días, y más adelante quedará el mismo tiempo aislados en otro centro antes de regresar a sus hogares, como lo establecen los protocolos epidemiológicos.
Esta fuerza juvenil, explicó la primera secretaria de la UJC, permanece de forma voluntaria en la Universidad de Sancti Spíritus José Martí, los politécnicos Orlando Paneca y Armando de La Rosa, el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas, (IPVC), Eusebio Olivera y la escuela especial Protesta de Jarao.
«Ha sido trascendental el apoyo de nuestra juventud en esta etapa de pandemia. Están presentes en las pesquisas activas y los fines de semana se suman a los trabajos voluntarios dirigidos a la producción de alimentos», añadió.
En homenaje al aniversario 44 del crimen de Barbados, representantes del Comité Provincial de la UJC y del juvenil contingente depositaron una ofrenda floral en el Memorial de los Mártires, ubicado en una céntrica área de la urbe del Yayabo.