En la reunión se decidió la paralización del transporte público con el objetivo de limitar la movilidad de las personas. Autor: Oilda Mon Publicado: 10/04/2020 | 12:14 am
«Cuba siempre ha demostrado, en Revolución, unidad; y hoy la unidad pasa por la responsabilidad, por comprender esa responsabilidad y actuar con esa responsabilidad», subrayó este jueves el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al encabezar la reunión que cada tarde chequea la situación de la COVID-19 en la Isla.
Las decisiones que está adoptando el país no son para molestar a nadie, aseguró. «Lo estamos haciendo para salvar vidas y aunque nos duela tenemos que hacer sacrificios; estar en la casa, no visitar a la familia, ni a los amigos». Si no terminamos de entender eso, dijo, no vamos a controlar la pandemia.
En el encuentro —donde se pasó revista al trabajo de los Consejos de Defensa de las provincias de Pinar del Río y Artemisa; y el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, actualizó sobre el impacto de la enfermedad en la nación— el Jefe de Estado reiteró, sin alarmas, que la nación aún no está en su peor momento.
«Todavía en el país la pandemia no se ha manifestado en su mayor magnitud. Solo con el aislamiento social podemos resolver que esa magnitud no llegue a tener el comportamiento de los modelos».
Una parte importante de los que están en las calles, comentó, no está solo haciendo colas. Hay mucha gente en las esquinas, conversando en grupo; personas que salen a jugar dominó, a caminar, y que hasta han hecho fiestas. Eso es una irresponsabilidad, reiteró, y no podemos usar otro término.
«Eso no se resuelve solo con represión, con medidas, con multas. Se resuelve con comprensión y con una manera de actuar responsable y civilizada», agregó Díaz-Canel.
«Lamentablemente son los menos los que actúan así, pero esos menos son los que están poniendo en juego todo el esfuerzo que está haciendo el país y el esfuerzo de la mayoría».
Entonces, agregó, la mayoría no puede permitir que una minoría sea la que empañe esto. «Aquí lo que estamos buscando, como resultado final, es que tengamos la menor afectación posible en vidas humanas».
El mandatario se refirió a la muerte por COVID-19 de tres cubanos en las últimas horas, «el día que más fallecidos hemos tenido», lamentó; y extendió sus condolencias a familiares y amigos.
Por el comportamiento de la pandemia, destacó, los casos están aumentando y van a seguir haciéndolo. El éxito que tengamos en la detección y la disminución, precisó, depende mucho de cómo se cumplan las medidas por parte de los organismos de la Administración Central del Estado, los Consejos de Defensa Provincial y Municipal, las organizaciones de masas, las fuerzas del orden público y la población. «Es una batalla de todos y donde todos nos estamos apoyando».
El Presidente de la República precisó que ese trabajo se tiene que fundamentar en la necesidad de preservar el aislamiento social en la mayor magnitud posible.
«Se trata de apoyar esta lógica de pensamiento y de actuación en un grupo de medidas que van sobre todo encaminadas a limitar la movilidad de las personas», comentó en referencia a las nuevas decisiones relacionadas con la paralización del transporte público, así como el cierre de grandes centros comerciales y un mayor abastecimiento de los puntos de venta en los barrios, entre otras importantes disposiciones.
Díaz-Canel consideró que «en la medida que pasan los días y como no hemos entrado en el momento más complejo, hay personas que se van acomodando a la situación, como diciendo que no está pasando tanto, comparado con el mundo».
Hay quien llega a una rutina tal, valoró, que empieza a perder hábitos de higiene en los que hemos insistido mucho, como el lavado frecuente de las manos. «Tenemos que evitar el exceso de confianza, continuar con rigor el cumplimiento de las medidas higiénicas, el uso del nasobuco, el distanciamiento público en las gestiones de compras y, sobre todo, insistir en el aislamiento social, en el nuestro, en el de nuestras familias, en el de nuestros amigos y vecinos».
El Presidente de la República reflexionó que, con la jornada no laborable de este viernes y el fin de semana, «son tres días en los que, si actuamos consecuentemente, con responsabilidad y con el montaje de las nuevas medidas, podemos avanzar un tramo en la eficiencia en el enfrentamiento a la pandemia».
Eso es lo que estamos pidiendo a nuestro pueblo, concluyó, y estamos seguros de que la mayor parte asimilará esta solicitud.