Balance del Mincin tuvo en cuenta temas de prioridad para la vida del país Autor: Prensa Presidencial Publicado: 21/02/2020 | 10:56 am
Si la gastronomía estatal satisface cada vez más la demanda interna y el comercio se acerca con más ofertas a las necesidades de la población, entonces los trabajadores del sector estarán pensando como país, afirmó el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
El mandatario participó en el balance de la gestión del Ministerio del Comercio Interior (Mincin) en el 2019 y las perspectivas para el año que corre, donde se discutieron y analizaron con franqueza los problemas que atenazan una mejor oferta de bienes y la prestación de servicios al pueblo.
Por segundo año consecutivo el Jefe de Estado asiste a un encuentro donde más que hacer autopsias, se aclaran y trazan estrategia. Del primero a este —señaló— comprobamos que el Mincin «ha desarrollado un esfuerzo intencionado e intenso para reordenar el comercio y los servicios y se ha perfeccionado el control y la exigencia.
«Se trabaja en un ambiente más profesional y se ha logrado mayor interacción con otros ministerios y sectores», y se han logrado crear y establecer herramientas y procedimientos para perfeccionar la labor y el control, añadió.
El Presidente reconoció a los directivos y trabajadores del comercio «por el enorme esfuerzo para garantizar que los productos de la canasta básica lleguen puntualmente —de forma mayoritaria— a los núcleos familiares», a través de unas 13 000 tiendas y bodegas distribuidas por todo el Archipiélago cubano, a pesar de las limitaciones con el combustible.
Resaltó la forma en que llevan a cabo programas sociales muy sensibles para atender de manera diferenciada a las personas más vulnerables. Al respecto, refiriéndose momentos antes a los ataques a que está sometida la Revolución, reconoció la entrega, a través del sistema del Mincin, de alimentos y artículos específicos para los niños celiacos, para los bebes con bajo peso al nacer, y a los encamados, el Sistema de Atención a la Familia (SAF), la canastilla... «En qué lugar del mundo los gobiernos se preocupan por eso», expresó.
DE 2019 Y PARA EL 2020
Fotos: Archivo digital de JR
La titular del Mincin, Betsy Díaz Velázquez, al hacer el balance de problemas y éxitos del 2019 y las estrategias para 2020, informó que el organismo se trazó cuatro objetivos de trabajo para el 2019, y todos fueron evaluados de «regular».
Al abundar en la gestión de las entidades, expuso que en el comercio mayorista la circulación mercantil del sistema empresarial alcanzó 8 376 millones de pesos, el 99 por ciento del plan, pero 763 millones de pesos menos con relación a 2018.
«Aunque en los resultados incidió el incumplimiento del plan de importación y las afectaciones en las entregas por los proveedores nacionales, fue insuficiente la gestión para explotar las potencialidades, la movilización de inventarios de productos industriales y diversificar nuestros servicios».
En el abasto mayorista a las formas de gestión no estatal, las ventas sumaron 337 millones de pesos, entre ellas las de alimentos en Mercabal y en los Mercahostal, y productos no alimenticios de comercializadoras mayoristas seleccionadas.
Los programas y servicios vinculados al comercio minorista aportaron a la circulación mercantil el 92 por ciento de lo previsto en plan, incumpliéndose en 2 082 millones de pesos.
En el comercio minorista se brindó especial atención a programas priorizados, destacándose la canasta familiar normada y la venta de mercancías asociadas a canastilla, uniforme escolar, materiales de la construcción, calzado profiláctico, postrados, incontinentes y casos sociales críticos.
Vinculado a las actividades de servicios gastronómicos, se priorizó el Sistema de Atención a la Familia, que beneficia a 71 082 censados; la merienda escolar; y la recuperación de los centros de elaboración. Así mismo, fueron reanimadas unidades de carretera, el servicio en las terminales de trenes e instalaciones en todo el país, empleando la Contribución Territorial del uno por ciento.
Entre las insuficiencias —reconoció Díaz Velázquez— persiste insatisfacción de los consumidores con la calidad del pan, el arroz de producción nacional y el picadillo, fundamentalmente. Mientras que impactan de forma negativa en la calidad de los servicios, la carencia de insumos y equipamiento gastronómico
En cuanto a la Protección al consumidor, quejas, reclamaciones y denuncias de la población, la Ministra recordó la emisión del instrumento legal sobre la compensación y garantías de los productos y servicios que se ofertan en el comercio interior, y se ordenó el sistema de trabajo para la recepción y respuestas a las quejas, reclamaciones y denuncias de la población, pero no se han logrado avances en este ámbito, dijo.
TODO SUCEDE EN EL MUNICIPIO
Fotos: Archivo digital JR
El Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, destacó que el Mincin haya ido organizando y creando instrumentos para profundizar en la transformación del sistema de comercio y gastronomía según aprobó la dirección del país, pero eso —enfatizó— no es suficiente.
«El Ministerio es el organismo rector, pero la política se concreta en los municipios», por lo que recabó la participación de gobernadores e intendentes en las estrategias para la elevar la satisfacción y calidad de vida de la población.
Marrero orientó buscar en los territorios los abastecimientos que allí se producen, para hacer sostenible los servicios de gastronomía. También criticó la venta en estas instalaciones de un solo producto, como, ejemplificó, el pollo asado.
«Muchas veces se agarra el pollo de la caja y se pone en el horno, es lo más fácil», y eso es cuando no se vende crudo “por la puerta de atrás” del almacén. Si se logró llevar allí pollo —que se importa y cuesta bastante al país— hay que elaborar todos los platos posibles, así se da un servicio más variado, crece la calidad y se puede ingresar hasta más.
También expuso la urgencia de potenciar la gastronomía ligera. «Es a esas cafeterías a donde acude todo el mundo», pero en ocasiones no se priorizan las inversiones allí. Y llamó a ampliar los servicios de 24 horas donde tenga esa demanda.
El Primer Ministro, entre otras críticas, rechazó que en muchas instalaciones arrendadas solo se está vendiendo cerveza, ron, cigarro, «pellis», y no se quiera elaborar alimentos, cuando fueron creadas para dar un mejor servicio al pueblo. Lo mismo ocurre en las zonas rurales —añadió—, donde los círculos sociales, que muchas veces son las únicas instalaciones recreativas y de servicios.
Eso tenemos que eliminarlo, señaló Marrero Cruz, al igual que ofertar solo en los bares ron por trago, cuando Cuba es una potencia de la coctelería, con muchos cantineros de nivel mundial. «El pueblo —enfatizó el Primer Ministro— tiene que recibir mayores servicios y con más calidad».
Al balance anual del Ministerio de Comercio Interior asistieron Mercedes López Acea, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la CTC, y el viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca, además de ministros y viceministros de varias carteras.